Victor Montiel
Cambio tecnológico y competitividad
9-Jun-09
La teoría económica no alcanza a demostrar el rápido cambio tecnológico y su consecuente crecimiento económico que se registra en un país o en una región cuando ocurre una innovación. Antes de continuar con las principales corrientes del pensamiento que abordan este tema, optemos por definir algunas cuestiones y conceptos.
La ciencia es el conocimiento humano de lo natural y de lo social; se utiliza el método científico para comprobar la hipótesis y demostrar su vigencia en todo el mundo (bajo los mismos parámetros), por tanto el conocimiento creado es general.
La técnica es el conocimiento humano de lo natural y de lo social; sin embargo el método que se usa es la observación y la praxis, su vigencia y aplicabilidad se limita a un experimento concreto el cual no puede ser repetido en las mismas condiciones y por tanto el conocimiento creado es particular.
La tecnología es el resultado de aplicar un conocimiento (científico o técnico) en algún instrumento, con el objeto de mejorar las condiciones de vida del hombre.
La innovación es cuando una tecnología promueve el aparato productivo, es decir, es un concepto económico el cual implica la aplicación de un instrumento para favorecer las condiciones de producción-circulación-consumo de las cuales deviene un incremento en el nivel socioeconómico de la población. El mejor ejemplo es la utilización del microchip para facilitar las operaciones matemáticas (en un primer momento) y ahora se utiliza para facilitar proceso contables, administrativos, financieros e incluso es base para la comunicación virtual (vía internet). La innovación se puede aplicar en:
• Producto: El microchip incrementó la fabricación y reducción de tamaño de las computadoras en los ochentas, y esto favoreció el uso de internet en los noventas.
• Proceso: El microchip favoreció la flexibilización de las máquinas y su multifuncionalidad, haciéndolas más dinámicas y versátiles ante cambios inesperados en la demanda.
• Organización: El microchip mejoró los procesos contables y financieros, haciéndolos más fáciles y rápidos y esto contribuyó a que empresas obtuvieran grandes márgenes de ganancia.
La difusión tecnológica se refiere a la extensión de la innovación hacia otras ramas y otras actividades económicas, dinamizando entonces al resto de la economía y generando un efecto reforzado en el crecimiento económico.
Pero cómo se da este crecimiento, y que es lo que contribuye a la innovación y difusión tecnológica. Esto se verá en las diferentes posiciones teóricas que se abordan a continuación.
Teoría sobre los ciclos económicos, crisis y tecnología
Las teorías de los ciclos económicos y el cambio tecnológico recuperan su posición original para estimar cuánto duran las crisis y de qué forma se puede salir del fondo; autores destacados como Kondrátiev, Mandel, Shumpeter, Freeman-Perez, entre otros, son revisados para fundamentar e interpretar la más fuerte crisis económica mundial vista desde los años 30.
Ciclos Económicos:
Kondrátiev
Para Kondrantiev las causas que explican los puntos de inflexión son los cambios tecnológicos y las innovaciones. Estas a su vez se explican cuando existe un incremento o decremento acelerado de la producción de bienes de capital. El ciclo Kondrátiev (ciclo largo) dura aproximadamente 45-60 años.
Durante la fase de ascenso aumenta la producción de bienes agrícolas, el nivel de precios se mantiene y en algunos casos aumenta (bienes de capital) y se abren nuevos mercados. Durante la fase de descenso la producción de bienes agrícolas disminuye, el nivel de precios disminuye (por los b. de capital) y se descubren una serie de inventos que son aplicados hasta la recuperación.
El cambio tecnológico es endógeno al proceso económico, y se difunde a otras ramas e industrias en la medida en que se hacen factibles económicamente.
La evidencia empírica del uso del semiconductor refuta sus resultados, pues para los años 70 tenemos una reconversión tecnológica que deriva en recesión económica; y eventualmente se recupera mientras se difunde hacia otros segmentos comerciables. Para el nuevo siglo se piensa que estamos a mitad del descenso de la onda por lo que los años de depresión apenas comienzan.
Mandel
Las causas que explican los puntos de inflexión son los cambios en la tasa de ganancia del capitalista. Este cambio se relaciona con la desvalorización del capital o viceversa, siempre que exista un contratiempo entre la producción y la realización de las mercancías. El ciclo de Mandel dura aproximadamente 25-50 años.
Durante la fase de ascenso las relaciones sociales de producción favorecen al capital y por esta razón es muy común que se acumule cada vez más capital (gracias a la mayor sobrexplotación). Desde el punto de inflexión llamado “valle”, la tasa de ganancia comienza a desplegarse en aquellas ramas donde ha sido aplicada la revolución tecnológica por lo que en el ascenso (recuperación-expansión) se tiene una gran difusión del cambio tecnológico. Durante la fase de descenso el capital se desvaloriza y las relaciones sociales favorecen al trabajo, por lo que es aquí donde se tiene que dar la revolución social ya que el capital está debilitado. Desde el punto llamado “pico”, la tasa de ganancia se desploma y los capitales comienzan a moverse hacia sectores aún dinámicos o hacia aquellos que vislumbren una tasa de ganancia positiva, que como se ha dicho son los primeros en implementar el cambio tecnológico.
Por tanto, la tasa de ganancia es un indicador retrasado ya que su movimiento se registra cuando el cambio tecnológico ya sucedió, pero es preciso y fiable porque en cada movimiento se viene gestionando y vislumbrando la fase en la que nos encontramos actualmente.
Volviendo al ejemplo del semiconductor, la tasa de ganancias hacia los años 60s era alta, pero para los 70s cae precipitadamente ya que es allí el boom de la revolución tecnológica; durante los 80s y 90s el capital se va recuperando y los sectores van incorporando los avances tecnológicos, y es hacia finales del 2000 cuando la tasa de ganancia vuelve a caer y se maneja un periodo relativamente corto de estancamiento; esto podría significar el fin de un ciclo Mandel y el comienzo de otro donde se esté gestionando una nueva revolución tecnológica.
Schumpeter
La causa principal de los movimientos ondulatorios son la innovación y el espíritu emprendedor. La primera está en función de los adelantos tecnológicos que surjan en un momento determinado (nuevos productos, procesos, mercados y/o formas de organización), el segundo está en función de riesgo que toma la persona al aplicarlos e implementarlos.
Las innovaciones se dan por grupos o “bandadas”, ya que no surgen solas y se pueden aplicar a un sinfín de productos, procesos u formas de organización. Con esto las innovaciones se dan en ramas concretas y se diversifican al resto de la economía conforme el espíritu emprendedor y la destrucción creativa se desenvuelvan.
Schumpeter menciona que los ciclos largos (Kondrátiev de 50 años aprox.) y los ciclos cortos (Kuznets de 20 años y Juglar de 10 años) se contraponen y juegan en si un rol dependiente y reforzado; es decir, los ciclos cortos ascienden y descienden según la actividad imperante en el ciclo, mientras que los ciclos largos avanzan en su onda arrastrando los efectos acumulados de todas las actividades, de esta forma apoya la formación de largas y cortas ondas durante un periodo considerable.
Al igual que Kondrátiev y Mandel, Schumpeter dice que en la fase depresiva es cuando se desarrollan las innovaciones (generando una renta monopólica), y se da el punto de inflexión cuando otros agentes imitadores adquieren esas innovaciones y las aplican a sus respectivas empresas (generando una distribución de la renta hasta que se acaba).
Freeman-Pérez
Para Christopher Freeman y Carlota Pérez, las innovaciones y el cambio tecnológico son factores necesarios más no suficientes para el dinamismo económico. Para determinar un “paradigma tecno-económico” se debe formalizar un marco social e institucional que lo acompañe y lo fortalezca.
Es en la fase de expansión donde se localiza el mayor número de innovaciones, pues económicamente son más viables en este momento. Las invenciones pueden ser básicas e incrementales, y forman sistemas tecnológicos en forma de enjambre. Pérez analizó el paradigma tecno-económico relacionado con la revolución del semiconductor y dedujo que un ciclo industrial dura lo que el ciclo de vida del producto innovador (hasta 3 años aprox.), pero que un ciclo tecno-económico dura hasta que es derrocado por un nuevo sistema tecnológico y su cambio socio-institucional que provoca (50 años aprox.).
Dentro de la etapa inicial y la etapa final del paradigma (fase depresiva para los ciclos largos Kondrátiev), se abren oportunidades de desarrollo para los países en vías de desarrollo pues es allí donde pueden acortar la brecha tecnológica que los separa, de manera que impulsen y adquieran de forma más temprana el nuevo paradigma ya que no están tan enraizados con el viejo paradigma.
Los nuevos modelos de desarrollo económico están basados en esta idea (aplicada por países asiáticos), a través del Fomento a las Exportaciones, esto porque las empresas multinacionales llevan conocimiento a los países en desarrollo y si éstos conocimientos se comparten y son enraizados a la sociedad, el país en desarrollo tiene oportunidad de avanzar en el espiral industrial y alcanzar mayores niveles de bienestar social. Japón apoyó la instalación de empresas norteamericanas con el fin de copiar su planta productiva y hacerla más dinámica, más económica y con mayor nivel de productividad; esta técnica fue también utilizada por Corea, Indonesia, y ahora China.
Teoría neoinstitucionalista y Política de ciencia y tecnología
La teoría neoinstitucionalista del cambio tecnológico y la innovación se basa en que las instituciones son “puentes” de enlace para vincular aspectos tecnológicos de una empresa a otra o de un centro de investigación a una empresa, dando como resultado una mayor productividad y/o la mejora o la invención de productos para ofrecer en el mercado. En otras palabras, las instituciones son mecanismos para la transferencia de conocimientos y para la innovación económica de un país o región.
Una institución se refiere al conjunto de normas y reglas que imperan en un juego (especialmente económicas); su importancia radica en que sus actores: las organizaciones como empresas, centros de investigación, universidades, gobierno, etc. juegan su propio rol pero se relacionan entre sí ayudados por estas instituciones. Sin embargo es importante mencionar que quien tenga más poder o mayor sean sus intereses, tendrá mayor peso en sus decisiones, y por tanto las innovaciones estarán en función de sus acciones.
Cada institución, visto como un conjunto de normas, viene agrupado de una cooperación colectiva que afecta hacia dentro de la organización (cultura empresarial por ejemplo), y hacia afuera mediante la negociación colectiva (cooperación interfirma por ejemplo). Y se constituye a su vez como una acción colectiva que presiona a otros organismos para la realización de sus fines (la formación de cámaras empresariales es un ejemplo).
Respecto lo anterior surgen costos de negociación o transacción, ya que la información suministrada no es la completa, además de que impera el sentido de oportunismo entre los jugadores con mayor peso económico. De estos costos de transacción (Ct) se pueden distinguir el costo de información (ci) y el costo de cumplimiento (cc), el primero porque se debe buscar la información más confiable en el mercado y el segundo porque se debe proteger mediante contratos los derechos de propiedad.
Respecto a los Costos de información (ci), se requieren instituciones que regulen la información y la depuren de aquella que es poco fiable, incompleta o falsa. El conocimiento adquirido y comprobado (comunicable y tácito) es muy importante que se difunda mediante mecanismos formales, es allí donde las instituciones como el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología aplican sus instrumentos para facilitar este conocimiento a empresas innovadoras. La estandarización de la información está relacionada con la minimización de costos vía: economías de escala, información específica y minimización de riesgos e incertidumbres.
Respecto a los Costos de cumplimento (cc), se requieren instituciones que regulen por la vía legal la formalización de contratos no leoninos donde ambas partes se beneficien del mutuo acuerdo. Los derechos de propiedad (privados, comunales, estatales, universales, y los que no contienen propiedad) deben de tener reglas claras de uso y usufructo, de propiedad, de acción y de castigo para que no sea tergiversada la ley. Estos derechos son el incentivo principal para la innovación ya que representan la posibilidad de beneficiarse mediante la invención de nuevos productos, procesos u organizaciones; y de allí su explotación y difusión hacia otras áreas y sectores económicos (innovar). Las instituciones como el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual deben saber mantener y vigorizar las actividades inventivas (de las Universidades y Centros de Investigación) para que sean externalizadas hacia el aparato productivo (las Empresas innovadoras) y produzcan así un efecto positivo en la competitividad del país o la región.
Cuando un paradigma tecno-económico cambia (como lo fue en los años 70s), las instituciones deben ser capaces de modificar su estructura y sus propias normas para adaptarse al nuevo modelo; si no hay este cambio pueden afectar la estructura económica o retrasar el progreso alcanzado. Para esto la teoría neoinstitucionalista se alimenta de la teoría evolucionista y menciona que debe haber un proceso intensivo en aprendizaje, esto con el fin de que cuando surjan nuevas innovaciones, la institución sea la primera en reaccionar favorablemente para su adaptación y reacomodo socioeconómico.
Los doctores Roberto López y Javier Jasso coinciden que la política del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología debe tener un plan de desarrollo y una coherencia con los programas de estatales de Ciencia y Tecnología y con la política industrial, a esto lo llaman Sistema de Políticas de Innovación. Este sistema, mediante la cooperación de Empresas Innovadoras, Centros de Investigación (Universidades) y las Instituciones Gubernamentales, tiene por metas:
• Ayudar a diseñar políticas públicas.
• Adecuar las leyes (principalmente de Propiedad Intelectual).
• Aumentar el impacto social.
• Fortalecer el capital humano.
• Vincular proyectos productivos de investigación-empresa.
• Ampliar el riesgo crediticio a todas las instituciones participantes.
• Definir qué actores son los más propicios para generar innovación a nivel nacional: Grandes empresas (transnacionales), Pequeñas empresas, Centros de Investigación o Gobierno.
• Definir los programas sectoriales y regionales basándose en las ventajas competitivas del territorio: Educación, Recursos Naturales, Agricultura, Industria y Servicios.
El mejor ejemplo que se puede ofrecer está en Guadalajara, donde las grandes empresas de electrónica como Intel, HP, IBM han transferido tecnología a los pequeños proveedores para que puedan escalar en la pirámide industrial y producir productos con mayor valor agregado. El gobierno mediante el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología de Jalisco ha dado incentivos para esta transferencia y otorga financiamiento para proyectos productivos en materia de tecnología de electrónica-informática; a su vez los Centros de Investigación dependientes del Cinvestav-IPN, la Universidad de Guadalajara y el ITESO han favorecido estos proyectos productivos con capital intelectual (investigadores y estudiantes) y fortalecen el vínculo entre Universidad-Empresa. Finalmente los programas sectoriales de ayuda a la Industria Electrónica-Informática brindan recursos y capacitación para las empresas entrantes; y los programas regionales (por ejemplo en materia Educativa actualizan y especializan la formación de ingenieros) otorgan el material preciso para que se fortalezca la industria y la región pueda competir a nivel mundial.
Teoría evolucionista y Sociedad del conocimiento
La Teoría evolucionista se basa en los cambios económicos, sobretodo la innovación y el cambio tecnológico, basándose en tres aspectos: la trayectoria, el paradigma tecno-económico y el sistema nacional de innovación. Sus principales ponentes son:
Nelson y Winter
Estos dos pioneros, basaron su teoría sobre las hipótesis conductistas y rutinarias que cada acto repetitivo generaba un estímulo que después se incorporaba al cerebro en forma de conocimiento o habilidad, y que la acumulación de éstas generaba la memoria organizacional de cualquier individuo (o empresa en el caso económico).
Una parte del conocimiento es tácito (no explicable) y es trasmisible gradualmente con la experiencia y la habilidad. El conocimiento tecnológico, en cambio, es explicable y trasmisible pero su obtención es muy costosa, depende de las habilidades y el conocimiento tácito que haya en la organización, tanto en su personal como en su capital físico, pero que sólo se puede dar en esa conjunción “mágica” de elementos.
El Sistema Nacional de Investigación, lo definen como la cultura institucional agregada, la cual son las empresas, los centros de Investigación y Desarrollo y las Universidades quienes interactúan dentro de un marco institucional propicio para la innovación. Los aspectos económicos, comerciales, sociales, políticos, tecnológicos, financieros, de información, legales, laborales, etc. tienen una relación directa con el quehacer científico aunque su vínculo no sea distintivo.
Giovanni Dosi
Para Dosi, las categorías determinantes de la innovación son 2: el mercado (atracción de demanda) y la tecnología (empuje de oferta). El Mercado es la fuerza mediadora de la innovación pues a partir de él, se determina “lo que se quiere”, “lo que se compra”, pero su proceso es pasivo y mecánico de reactividad. La Tecnología es la fuerza que empuja a los productores a innovar, es decir, “a desarrollar nuevos productos y mejorar procesos”, pero las variaciones de la distribución de ingreso afectan la actividad innovativa.
El paradigma tecnológico es un modelo de solución de problemas tecnológicos selectos sobre una base de principios derivados de las ciencias naturales y tecnológicas específicas; y su trayectoria es la forma como se van solucionando estos problemas. Dosi maneja que cuando surge un nuevo paradigma tecnológico, entonces los sectores genéricos se actualizan y emergen con soluciones propias ante este cambio; tales sectores son el transporte (de mercancías y de pasajeros), la producción de componentes químicos (energéticos y de aplicación industrial), y los circuitos de comunicación (semicondustores).
El flujo: ciencia tecnología producción, se combina con los factores sociales e institucionales para resolver intereses económicos, políticos y legales. A la entrada de las computadoras, los objetivos científicos estaban en función de los objetivos militares (años sesentas), y conforme fue avanzando la trayectoria se fueron incluyendo otros sectores políticos; a su vez su comercialización fue factible gracias a la disminución de precios y de barreras de propiedad legal.
Carlota Pérez
Pérez a diferencia de Dosi, considera que el paradigma no es sólo tecnológico sino también económico, porque eje principal del cambio tecnológico son los productos y procesos productivos rentables; es por eso que lo llama paradigma tecnoeconómico. El paradigma tecnoeconómico es una innovación radical que da lugar a la aparición de un nuevo producto o proceso, este producto se considera un “boom” para la generación de productos incrementales y derivados.
Cuando surge un paradigma tecnoeconómico nuevo, existe un periodo de choque con el viejo paradigma, y es allí cuando el marco socio-institucional juega un rol importante para la transformación y la armonía que exige el cambio tecnológico, transformando así la esfera económica y social. Cada paradigma requiere una nueva infraestructura que permita facilitar la transformación y el goce de beneficios surgido de la nueva tecnología; esta revolución afecta a instituciones, empresas, gobierno e incluso incrementa los beneficios productivos de la mano de obra (la cual también es re-adiestrada a las nuevas necesidades).
La difusión de un paradigma tecnoeconómico abre una ventana de oportunidad para los países en vías de desarrollo, los cuales al no tener arraigado el paradigma anterior pueden acceder y aprender este nuevo paradigma de forma más rápida que aquellos países hegemónicos; de este forma el desarrollo económico salta años de investigación y se puede colar entre países emergentes.
Oportunidad tecnológica
Carlota menciona que existe alrededor de 20 años de armonía entre paradigmas y que cada paradigma tiene 4 fases, dentro de la primera fase (para paradigmas nuevos) o dentro de la cuarta (para paradigmas viejos) es donde un país en vías de desarrollo puede acortar la brecha tecnológica que lo separa de los países industrializados, esto es lo que se llama oportunidad de saltar la brecha tecnológica. En estas fases los principios científicos y técnicos necesarios para la innovación pueden aprenderse en Universidades y Centros de Investigación, mientras que en las etapas intermedias las barreras del conocimiento se incrementan. Las empresas innovadoras deben aprender a danzar con lobos, pues grandes consorcios intentaran eliminarlas por todas las vías, aquellos más inteligentes tendrán alianzas estratégicas con ellas o con el gobierno para su protección.
Estructuras de poder como condicionantes de ingreso
Fase en la trayectoria de vida del producto y su tecnología
Introducción Crecimiento temprano Crecimiento tardío Madurez
Foco: Factores competitivos Calidad del producto; prueba del mercado Eficiencia productiva; acceso al mercado Escala y poder de mercado Menores costos
Competencia y poder Muchos competidores nuevos Firmas en crecimiento y lucha por los mercados; Emergencia de lìderes Tendencia a la concentración; estructura oligopólica Poder financiero; búsqueda de nuevas oportunidades rentables y de soluciones para alargar la vida de las existentes
Keith Pavitt
Para Pavitt las empresas grandes desarrollan productos específicos nuevos dentro de su sector; las pequeñas firmas y especializadas están en simbiosis con las grandes firmas para el desarrollo de estos productos; y las empresas que no tienen capacidad de innovación, sus principales motores de desarrollo provienen de sus proveedores. Por tanto hace una taxonomía de aquellas empresas con capacidad de innovar:
1. Empresas proveedoras de productos y servicios innovadores, su principal consumidor es el gobierno y grandes compañías subcontratistas; su beneficio económico está en las rentas y el oportunismo de vender a precios más altos.
2. Empresas de producción intensiva, a gran escala (producción de gran mercado) y especializados (producción de alto valor agregado); sus beneficios devienen del “know how”, el secreto industrial y las patentes.
3. Empresas productoras de bienes de tecnología de punta; sus principales activos son el conocimiento, la ingeniería y la Investigación y el Desarrollo; su relación es muy estrecha con Universidades y Centros de Investigación, quienes resultan ser también sus principales clientes; la dinámica de aprendizaje es una barrera importante para evitar la entrada de imitadores.
La teoría evolucionista marca el cambio tecnológico a partir de factores internos y utiliza hechos estilizados como la incertidumbre, las instituciones, el aprendizaje y los clúster regionales como formas de innovación. La trayectoria es incierta puesto que nadie sabe los que va a perdurar en el mercado; hasta nuestros días el uso del microchip, la computadora, el software, el internet han facilitado la comunicación, y hoy en día evoluciona sin tener aún en cuenta lo que vamos a obtener en un futuro.
La sociedad del conocimiento fundamenta su importancia en las tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) pues debido a ellas las empresas se han vuelto más flexibles en sus formas e producir (a través de la reconfiguración global y la nueva división del trabajo), han adoptado nuevos métodos de comercialización y producción como son el khan ban y el just in time, y a su vez han permitido progresar a economías en vías de desarrollo que impulsan sus exportaciones a partir de una mayor valor agregado pero también han marginado a muchas economías del desarrollo por su brecha tecnológica.
Las TIC han revolucionado también la forma de comunicarnos, pues a partir de la red global (internet) se puede relacionar con individuos de varios países y adquirir ciertos comportamientos y conocimientos dignos de otras partes del mundo; a su vez las nuevas comunidades virtuales han fomentado la relación entre individuos cibernéticos los cuales “llegan al extremo” de preferir relacionarse vía web en lugar de relacionarse físicamente con amigos (esto tiene una implicación sociológica y psicológica muy fuerte porque se pierde el sentido del tacto físico y las emociones se bifurcan).
Bajo la sociedad del conocimiento, el vínculo más importante para generar y aplicar conocimiento es el ciclo de Ciencia ProducciónMercado; pues tanto las Universidades generadoras y transformadoras de las ciencias, las Empresas aplicadas a la producción de bienes y servicios nuevos o mejorados, y el Mercado quien se beneficia en última instancia de las nuevas tecnologías e influye al mismo tiempo en su transformación. Esto aplicado a todos los niveles y sectores: agrícola, industrial, y principalmente servicial ha incrementado su productividad y competitividad; el servicial sobre todo en lo financiero, educación, salud, y servicios personales (subcontratación). Las principales tecnologías afectantes de este resultado son: la nanotecnología, la biotecnología, la informática-electrónica, y la cuántica.
Teoría neoclásica y Gestión de la tecnología
Los teóricos llamados neoclásicos basan su teoría en la optimización de los recursos escasos a partir de un análisis marginalista. Los supuestos generalmente aplicados se refieren a:
1. Modelo de competencia perfecta, es decir, existe información completa acerca de los precios de los factores, existe homogeneidad en los factores por lo que es indiferente su uso y existe racionalidad perfecta de los factores de la producción.
2. Modelo de Equilibrio general, lo que quiere decir que se llega a un equilibrio en el largo plazo.
Para los neoclásicos, sobre todo en el modelo de Solow, se tiene que las variables Trabajo (L), Capital (K) que determinan la ecuación, y se refieren al conjunto de técnicas de producción que combinadas forman el producto total: Q. La tecnología entra de manera exógena al modelo (A) y su efecto está cuando el cambio tecnológico desplaza la producción hacia resultados más óptimos, pudiendo generar más producto con la misma combinación de insumos trabajo-capital o generando el mismo producto pero con una técnica que utiliza menor cantidad de insumos.
Q= A*(La)*(Kb) donde: a+b=1 (rendimientos constantes a escala)
La exogeneidad del modelo se define a partir de que no es clara la explicación sobre tecnología (A), es decir, no se explica qué factores lo determinan y cómo este se vincula hacia adentro de la “caja negra”. Sin embargo esta teoría es quien más explica el crecimiento de una empresa, región o país a través de las matemáticas; usando matrices de insumo-producto y funciones de productividad y rentabilidad; se determina también el pago a los factores de la producción, justificando así que el Capital sea quien más se favorezca de una innovación tecnológica.
En la actualidad nuevas corrientes de esta teoría aceptan que la tecnología no es neutral al crecimiento de la producción, su vinculación hacia los insumos es muy importante para determinar el crecimiento económico por medio de la tecnología incorporada (al capital o al trabajo). Al igual que Schumpeter, aceptan la gran responsabilidad del empresario innovador y su habilidad para manejar el conocimiento creativamente, en respuesta a las necesidades del mercado.
El Dr. José L. Solleiro maneja que lo principal para una empresa innovadora es saber gestionar la tecnología, esto a partir de un paquete tecnológico, que es un conjunto de posibilidades técnicas las cuales se adaptan a una necesidad, generando así un nuevo producto o proceso que es comerciable. El paquete tecnológico incluye:
1. Tecnología del producto: Incluye diseño y dibujos industriales, normas y estándares de producción, especificaciones, instructivos, prototipos y manuales de operación. Ingeniería a detalle.
2. Tecnología del proceso: Incluye memorias de cálculo, diagramas de flujo, descripción del paso a paso, materiales, especificaciones de los materiales, cálculos de rendimientos y manuales de control de calidad. Manufactura.
3. Tecnología del Equipo: Incluye planos de planta, distribución, memorias de instalación, maquinaria y equipo, memorias del equipo, mantenimiento y corrección y capacidades del equipo. Construcción y arranque.
4. Tecnología de Operación: Incluye tiempos y movimientos, seguridad en la planta, uso de energéticos y agua, gestión ambiental, control de operación, registro y manejo de los recursos. Gestión industrial y financiera.
Paquete tecnológico
La gestión tecnológica identifica el potencial y los problemas tecnológicos de una empresa para desarrollar e implantar planes de innovación y mejora continua; con esto la gestión enriquece el patrimonio empresarial, administra las ideas innovadoras de la empresa, las protege, las asimila para todas las áreas y vigila el surgimiento de nuevas ideas, también evalúa su desempeño en función de lo que se quiere lograr, para esto se vale de herramientas como:
Análisis FODA.
Curva “S”.
Benchmarking.
Mapas tecnológicos.
Cienciometría: Documentación científica y búsqueda de datos.
Modelos de inteligencia.
Evaluación de contribuciones tecnológicas del personal.
Seguimiento y control de software especializado.
Matrices de capacidades.
Evaluación de resultados.
Matriz tecnología-producto-mercado.
Identificación del Estado de Arte.
Las empresas innovadoras tienes como rasgo característico:
Ser creativas,
Ser conscientes de la necesidad y la capacidad de gestión,
Tener capacidad financiera,
Contar con equipo interno competente y
Tener visión de negocios (oportunista).
Teoría clásica y la Propiedad intelectual
Los clásicos hablan del cambio tecnológico basado en la estructura económica que predomina; el Oligopolio explica este cambio debido a la rivalidad empresarial que existe en el abatimiento de costos (maximización de los rendimientos a partir de la minimización de costos de producción), ya que ni en el Monopolio ni en la Competencia perfecta existe un incentivo así para mejorar el proceso de trabajo; además en este tipo de mercado se tiene la posibilidad financiera para poder absorber gastos en Investigación y Desarrollo. Los principales exponentes son:
Fisiócratas
El origen de la riqueza está en la producción material y surge de la tierra; por tanto la agricultura es de donde surge la acumulación de capital aunque tiene un límite físico; son los arrendatarios y los asalariados la clase productiva, mientras que los artesanos y los propietarios de la tierra (nobleza e Iglesia) son la clase estéril.
El cambio tecnológico está en función de los métodos más avanzados de cultivo y su valor está en función de la fertilidad de la tierra, entre mayor sea la fertilidad menor será su precio pero más rápido se podrá emigrar a nuevas tecnologías.
Adam Smith
El origen de la riqueza está en la especialización del trabajo, es decir, la División del Trabajo es la clave para ser más productivo y por tanto generar más rentas. Las clases artesanales comienzan a ganar más réditos al ser aquella que involucra la mayor división, mientras que la Iglesia y la nobleza es su fuente de riqueza.
El cambio tecnológico es el aumento progresivo de la capacidad productiva, esto se debe al perfeccionamiento de la habilidad manual y mental y/o a la menor porosidad del trabajo. Para que el cambio tecnológico tenga sentido debe existir un mercado el cual lleve el egoísmo individual al bienestar social (“la búsqueda de su propio interés es la que favorece a la sociedad” Mano invisible).
La competencia entre diversos productores hace que el valor de un bien esté en función de los costos directos de producción (trabajo, tierra y capital); y en esto se destaca las ventajas absolutas que tiene un productor frente a otro, si en la producción resulta ser más barato un bien respecto a otro, entonces éste primer bien debe favorecerse su producción a nivel local.
David Ricardo
El origen de la riqueza está en el comercio de aquellos bienes en donde se posee una ventaja relativa; esto es que en la producción de dos bienes aquel cuya productividad sea mayor, en ese hay que especializarse. La distribución de clases es en tres: asalariados, capitalistas y terratenientes; los segundos son los favoritos porque ellos llevan todo el riesgo y la carga económica.
Ricardo dice que el valor de un bien dependerá del producto marginal; por ejemplo una tierra cuya productividad es 10 granos por metro cuadrado, frente a una tierra cuya productividad es de 5 granos por metro cuadrado, entonces la segunda tierra estará en desfavor por la mitad de producción, por lo tanto el precio que prevalecerá en el mercado será el costo de producción de la segunda tierra y así la primera tierra estará obteniendo una renta diferencial del doble.
Para Ricardo el cambio tecnológico está en los avances que surjan para mejorar el rendimiento agrícola, es decir, el cambio para incrementar la productividad y el rendimiento de las tierras; la competencia siempre favorecerá a aquellas tierras con mayor capital incorporado porque esto se traduce en mayores niveles de producción con un menor costo de producción.
Carlos Marx
El origen de la riqueza está en el plusvalor que genera el trabajador y que es apropiado por el capitalista; por tanto hay un clase social desfavorecida que es elemento clave para el cambio tecnológico. La clase trabajadora debe exigir y luchar por una mayor participación en la riqueza social, esto a través de la revolución social, la cual cambiará el modo de producción capitalista por un modo más equitativo, dándole a cada quien lo que le toca y a cada cual lo que necesita (modo de producción comunista).
Marx dice que el valor de un bien depende de los costos asumidos por el empresario, al descargarse una parte sobre el asalariado y su costo de vida y otra al desgaste sufrido por la máquina-herramienta, y también se refleja el valor agregado que no es remunerado al trabajador y que es apropiado como beneficio del capital en forma de utilidad y renta. La diferencia para Marx estriba que el cambio de valor a precio no es igual siempre y depende en primera instancia del poder de apropiación de plusvalor del capitalista sobre el asalariado, y en última del poder monopólico que tenga el capitalista en el mercado.
Acerca del monopolio, Marx lo consideraba un estado temporal donde alguien tenía una ventaja sobre sus adversarios, lo que le permitía gozar de un mercado cautivo con precios altos; esta ventaja muchas veces se refería a aspectos técnicos y tecnológicos que permitían costos de producción más económicos y costos de distribución más rápidos. De allí que el cambio tecnológico era central para el progreso económico capitalista.
Para Marx el capitalismo sólo puede vivir del cambio tecnológico pues es su razón para seguir sobrellevando las crisis económicas. Es de facto que la relación orgánica de capital será cada vez mayor conforme se siga avanzando en la ciencia moderna y conforme se vayan sustituyendo más trabajadores por máquinas. El principal temor de esto es que si máquinas comienzan a sustituir trabajadores, entonces el esquema de ingresos se tendrá que modificar pues: ¿quién comprará bienes si no hay un ingreso (salario) familiar?.
Para el mundo actual, tener un activo no sólo es tener una máquina-herramienta o un conocimiento, sino también protegerlo y de monopolizar su uso; es por ello que la propiedad intelectual existe para proteger las ideas, la creatividad humana y sobretodo permite “económicamente” el cambio tecnológico, ya que lo hace un incentivo que brindará utilidades futuras. La propiedad intelectual es un plusvalor que los intelectuales protegen para comercializarlo a quien lo quiera utilizar, o bien puede ser robado a alguien que lo desarrolló pero nunca lo patentó.
La propiedad intelectual incluye derechos sobre:
• Obras literarias, artísticas y trabajos científicos.
• Ejecuciones de artistas ejecutantes, fonogramas y su transmisión.
• Invenciones en todos los campos.
• Diseños industriales.
• Marcas y nombres comerciales y designaciones.
• Protección contra la competencia desleal.
• Todos aquellos derechos resultantes de la actividad intelectual en los campos industrial, científico, literario y artístico.
La patente es acuerdo entre el Estado y el inventor que posibilita al segundo la explotación monopólica de su invento durante cierto tiempo, por tanto genera un crecimiento económico para quien lo utiliza y para los sectores de aplicación, y a su vez es impulsor del cambio tecnológico ya sea en un área específica o una revolución tecnológica que afecta todas las áreas.
Las patentes pueden ser:
Proceso.
Máquina.
Artículo de manufactura.
Composición de materia.
Activos intangibles en E.U.A como porcentaje de los activos totales
Año Activos físicos Activos intangibles
1982 62 % 38 %
2000 30 % 70 %
La sociedad del conocimiento y la gerencia tecnológica requiere de un sistema legal para la protección intelectual, para que se germinen ambas. Invertir en un área de investigación con una empresa vanguardista, invertir en un país con sociedad del conocimiento avanzada e invertir en un sector tecnológico estratégico que sea promotor de nuevos productos tecnológicos son activos que todo país desea tener y para ello requiere que su aparato jurídico sea eficiente, honesto y sensato. Por tanto no es suficiente tener hombres inteligentes trabajando para empresas fuertes, sino también debemos tener un Estado dinámico y evolutivo que modifique cuando se requiera una reforma y que acepte errores humanos capaces de verificar y responder ante nuevas demandas mundiales.
Referencias básicas
1. Teorías económicas de la innovación tecnológica. Dr. Leonel Corona Treviño. Editorial Ciecas-IPN. 2002. México
2. Ponencia sobre Crisis económica, ondas largas y tecnología. Dr. Luis Sandoval y Dr. José J. Rodríguez. 17 de febrero de 2009. Facultad de Economía.
3. Ponencia sobre Política de ciencia y tecnología. Dr. Roberto E. López Martínez y Dr. Javier Jasso Villazul. 31 de marzo de 2009. Facultad de Economía.
4. Ponencia sobre Gestión de la innovación: conceptos, práctica y tendencias. Dr. José L. Solleiro. 5 de mayo de 2009. Facultad de Economía.
5. Ponencia sobre Propiedad Intelectual “la relación entre economía del conocimiento y propiedad intelectual”. Dr. Rodrigo A. Cárdenas y Espinoza. 12 de mayo de 2009. Facultad de Economía.
Referencias complementarias
6. Revoluciones tecnológicas y capital financiero: la dinámica de las grandes burbujas financieras y la época de la bonanza. Carlota Pérez. Editorial siglo XXI. 2004. México. (Teoría Evolucionista)
7. Introducción al crecimiento económico. Charles Jones. Editorial Pearson Education. 2000. México. (Teoría Neoclásica)
8. Economía del cambio tecnológico. Raymond Vernon. Editorial Fondo de Cultura Económica. 1979. México. (Sociedad del Conocimiento)
9. La Reestructuración del clúster electrónico de Guadalajara (México) y el nuevo aprendizaje tecnológico. Dr. Miguel A. Rivera, Dr. Alejandro Dabat y Dr. Sergio Ordoñez. Revista Problemas del Desarrollo No. 143. Editorial Inst. Inv. Económicas. 2005. México. (Teoría aplicada a un modelo regional)
lunes, 31 de agosto de 2009
viernes, 28 de agosto de 2009
Nueva Política del Desarrollo Regional en México
VICTOR MONTIEL
TEORÍA Y POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL Y URBANO
9-ENE-09
Antecedentes
Durante los últimas dos décadas la política económica mexicana ha estado sesgada a dos rubros: política sectorial (industrial) y política macroeconómica (cambiaria, monetaria y fiscal); y estas no han jugado el rol esperado para llevar al país a un desarrollo económico sostenible y sustentable. En el presente ensayo se manifiesta la importancia que tiene para toda investigación el tomar en cuenta el espacio económico como un nuevo factor de producción, que determina las cualidades y ventajas de un cierto territorio frente a los demás.
El estudio se divide en tres partes, la primera hace una revisión general de las teorías que aplican al espacio económico, tomando en cuenta la importancia de éste término, y su utilidad hoy en día; la segunda parte hace una revisión general de las políticas nacionales, sectoriales y regionales que han aplicado ciertas economías como la Unión Europea, China y en especial México; terminando con una evaluación de la situación nacional y las propuestas para una mejor política económica nacional.
El objetivo de este ensayo es esclarecer la falta de una visión espacial para aplicar política económica, sobre todo política de desarrollo a nivel regional y urbano. Esta falta de perspectiva hace que las políticas sectoriales, fiscales, monetarias, etc. además de cualquier proyecto de fomento económico y social tengan repercusiones limitadas para la población objetivo o para el sector en específico al cual se quiere ayudar.
a) Historia Económica Nacional (1988-2004)
Al finalizar el Modelo de Sustitución de Importaciones y la entrada de políticas neoliberales en 1982, México era considerado una economía estable gracias al milagro acontecido durante los años 70s; sin embargo la década de los ochenta se considera perdida ya que las crecientes tasas de interés acrecentaron una deuda externa impagable y la tasa de inflación se multiplico hasta llegar a ser de 25%. El país cayó en una recesión que pronto se convirtió en estanflación e hizo devaluar al peso mexicano frente a las divisas internacionales: dólar.
Las políticas de privatización de empresas estatales y paraestatales como Televisoras, Teléfonos, Bancos, Líneas aéreas, etc. no sólo vino a consolidar el poder monopólica, sino acrecentó los precios; y junto a las políticas de liberalización comercial y la entrada primero pasiva de nuevas inversiones y nuevas empresas llevo al quiebre de la economía ya que se desempleo a una tercera parte de la población, los ingresos decrecieron y con esto sus efectos negativos no hicieron esperar. El gobierno mexicano tomo medidas extraordinarias para controlar la inflación, en especial en materia fiscal y monetaria, pero su mayor logro fue cuando se instauro el Pacto Social.
Respecto a la política monetaria y cambiaria, lo que se quería era inyectar recursos provenientes de fuera y para esto el gobierno era el único capaz de sostener dicha tasa de interés, también promovieron créditos mediante los flujos monetarios con un nulo encaje legal con el fin de incentivar la liquidez en la economía y a su vez el tipo de cambio lo mantuvieron flotante con barras estabilizadoras que corregían el déficit en balanza de pagos de manera casi inmediata. La política fiscal de la misma manera incentivaba la inversión directa mediante la condonación de impuestos y aranceles a empresas maquiladoras de exportación.
Las reformas de primera generación (1982-1988) aumentaron los flujos de inversión directa extranjera (IED), descentralizaron al gobierno del ingreso petrolero ya que incrementaron las exportaciones de maquilas ubicadas en la frontera norte del país, a su vez que el coeficiente de importación se triplicó. Por el lado financiero, las tasa de interés quedaron al libre juego de mercado y los bancos ahora privatizados, buscaron obtener financiamiento externo, subiendo las tasas líderes de referencia, teniendo como respaldo de pago al gobierno federal y su seguro financiero: FOBAPROA.
Iniciados los años noventa, la economía resentía las reformas estructurales y sobre todo estaba inmersa en un ambiente de incertidumbre; por un lado el sistema electoral no garantizaba la plena democracia y por el otro el movimiento de las tasas de interés y de los tipos de cambio eran erráticos (gracias a esta incertidumbre), por lo que el choque no se hizo esperar y en 1994 fue cuando inversionistas nacionales y extranjeros sacaron del país millones de dólares (gracias a que la inversión no estaba controlada y los bancos al ser privados no se les pudo contener). La crisis fue de tal magnitud que llevo a una inflación del 50%, las tasas de interés eran extremadamente altas y el tipo de cambio era tal que se tuvo que devaluar drásticamente la moneda para poder subsanar el déficit público y la balanza comercial. A la alta inflación se le agregó la falta de liquidez en la economía y con esto más de la mitad de la población fue arrojada al umbral de pobreza y a una caída del producto inimaginable.
A pesar de lo anterior, la crisis se superó rápidamente y los niveles de déficit en balanza de pagos fueron absorbidos por el superávit en balanza comercial gracias al encadenamiento provisto por el TLCAN hacia los EE.UU y las exportaciones a este país (debido a la devaluación del peso que hace crecer las exportaciones). La economía mexicana creció sin crédito bancario, la volatilidad de los tipos de cambio y tasa de interés fue aún latente en épocas posteriores, y de las empresas nacientes lograron sobrevivir aquellas vinculadas al aparato exportador. Este evento dejó en claro que las políticas neoliberales eran contradictorias en el sentido de progreso nacional, ya que perjudicaron al bienestar social y al sistema económico nacional, pues después de todo se demostró que México era frágil frente al escenario global y no dejaba de tener un impactos respecto a lo que acontecía en el vecino del norte.
Frente a esto, para 1998 era claro que la maquila de exportación era una economía de enclave para aquellas regiones favorecidas y que además de generar empleo en cualquiera de su modalidad (formal o subcontratada) hizo crecer la migración campo-ciudad ya que el TLCAN sacrificó a casi todas las actividades agrícolas a cambio de que se modernizara la planta productiva nacional. La migración llegó a su punto más alto cuando se contabilizó la mayor partida de connacionales al país del norte en busca de nuevas y mejores formas vida, alrededor de 10 millones de personas en ese año, éstas provenían de las regiones dedicadas a la agricultura y por el TLCAN habían sido desfavorecidas.
Las regiones favorecidas por el tratado y que lograron integrarse en economías de enclave fueron: Tijuana, Baja California; Mexicali, Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; Chihuahua, Chihuahua; San Luis Colorado, Sonora; Nogales, Sonora; Hermosillo, Sonora; Torreón, Coahuila; Monclova, Coahuila; Piedras Negras, Coahuila; Nuevo Laredo, Tamaulipas; Reynosa, Tamaulipas; Matamoros, Tamaulipas; Monterrey, Nuevo León; La Paz, Baja California Sur; Guadalajara, Jalisco; León, Guanajuato; Querétaro, Querétaro; Cancún, Quintana Roo; Acapulco, Guerrero; entre otras. Las regiones afectadas por el tratado y especialmente dedicados a actividades primarias fueron: Zamora, Michoacán; Uruapan, Michoacán; Irapuato, Guanajuato; Celaya, Guanajuato; Arandas, Jalisco; Tepic, Nayarit; Colima, Colima; Córdoba, Veracruz; Martínez de la Torre, Veracruz; Cardel, Veracruz; Tehuacán, Puebla; Huamantla, Puebla; Oaxaca, Oaxaca; Chilapa, Guerrero; Comitán de Domínguez, Chiapas; entre otras.
A partir de 2000 se comenzó a direccionar la política comercial externa hacia otras latitudes que no fueran EE.UU., especialmente se quería exportar productos hacia Europa y Japón, y aunque se han elaborado acuerdos comerciales que permiten ciertas mercancías, los mexicanos no han podido sobrepasar la calidad requerida para satisfacer esos mercados; del lado de la inversión, tampoco se ha descentralizado ya que los mismos japoneses reconocen a México como un país con grandes cualidades para establecer sus transnacionales pero se deben fortalecer los encadenamientos internos que provean de insumos a estas grandes compañías. Actualmente la competencia con China, India y Brasil ha sido a favor de ellos y es muy posible que en los próximos años se pierdan muchas empresas maquiladoras para reubicarse en esas zonas, pero si se compromete a emprender acciones para fortalecer cadenas productivas y para generar productos de mayor calidad y valor agregado, es posible lograr exportar productos con baja elasticidad precio y líderes en su ramo; en algunos ramos ya se ha conseguido aunque más que limitaciones técnicas del producto, son las barreras no arancelarias las que protegen a los países desarrollados.
b) Disparidades regionales y el desarrollo alcanzado
El apartado productivo nacional se vincula con el desarrollo regional, a partir de que son las actividades sectoriales aquellas que mueven un territorio; y son la interdependencia de actividades las que vinculan dos territorios y conforman un sistema regional. El país cuenta con un sinfín de localidades que se entrelazan y comunican entre sí para formar actividades y esto se configura para constituir una región. Según el Dr. Clemente Ruiz Durán, existen 7 macro regiones al interior del país, que según se forman dadas sus características comunes, sus actividades motrices y complementarias, y sus vínculos comerciales y sociales, estos son:
Frontera: Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
Reconversión Industrial: Jalisco, Aguascalientes, Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí.
Centro: Distrito Federal, México, Puebla, Morelos, Tlaxcala e Hidalgo.
Petroleros: Veracruz, Campeche y Tabasco.
Sur: Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Turísticos: Yucatán, Quintana Roo y Baja California Sur.
Materias Primas: Sinaloa, Nayarit, Durango, Michoacán, Colima y Zacatecas.
Las disparidades que existen entre estas regiones son visuales y generales; las que mencionamos son causa por la especialidad a la que se han dedicado, o puede ser causa de la falta de organización y política industrial; pero hay que mencionar que cada región tiene concentraciones y disparidades hacia dentro y que son las actividades motrices y complementarias las que dan sentido de estudio para que se comporten así.
Los estados fronterizos están ligados a la economía de EE.UU. de manera umbilical, lo cual son fuertes exportadores de productos maquilados y su crecimiento depende del crecimiento del país vecino. El peso de la inversión externa radica en un 30-35% de la nacional y su índice de especialidad en manufacturas ha subido 1.25 unidades, especialmente en las industrias: eléctrica-electrónica, automotriz, textil y metálica básica. Su fortaleza económica se puede comparar con países latinoamericanos de relevancia como Paraguay y Ecuador.
Los estados de reconversión industrial, han creado infraestructura social para que empresas transnacionales se ubiquen allí, de tal forma que se forman clústers de actividades que mueven al resto de la economía regional; a cambio de la Inversión Directa que reciben, ellos condonan impuestos locales y federales además de que su infraestructura les permite gozar de ventajas de localización. El peso de la inversión externa abarca entre un 12-15% de la nacional y su especialidad manufacturera ha subido 1.45 unidades, con especial interés en el área de maquinaria y equipo, automotriz, metálica básica, textil y química. Su fortaleza económica se compara con los países de menor calibre del tigre asiático, tal como Vietnam y Tailandia.
Los estados del centro han reforzado sus actividades manufactureras a raíz de la apertura comercial; muchas empresas han cerrado frente a su incompetitividad y desde los ochentas el centro del país ha diversificado sus actividades, delegando así el crecimiento nacional a las regiones fronterizas y de reconversión industrial. A pesar de ser perdedores dentro del TLCAN, la inversión extranjera ha crecido de 10 a 15%, sobretodo en el marco de la inversión de cartera y para fomentar actividades industriales; con esto su especialidad también ha rebasado el promedio nacional por encima de 1.25 unidades y se mantienen las actividades tradicionales de: elaboración de alimentos, industria química, industria textil e industria papelera. Su fortaleza económica se compara con países europeos relevantes como Grecia y Bulgaria.
Los estados petroleros cuentan con el vital “oro negro” que es todavía pieza clave en la industrialización nacional, de este mineral se obtienen el 30% de los ingresos federales, y que a su vez se reinvierte en la empresa mexicana (paraestatal) más grande para desarrollar actividades complementarias que llevan a mejorar la extracción y transformación del petróleo. Su fuente de recursos externa es también vital para la modernización de la paraestatal, por ello cubre entre el 10-12%de la IED nacional, y su especialidad en la extracción de petróleo avanzó 15 unidades, es por ello que es su actividad primordial y debe convertirse en una empresa de vanguardia ahora que se le inyectan recursos exclusivos para la Investigación y el Desarrollo. La fortaleza de esta región sólo puede compararse con otros países exportadores de petróleo como Etiopía y Nigeria.
Los estados del sur cuentan con importantes recursos naturales y humanos, pero no los han podido focalizar hacia actividades de valor agregado; siendo que el Estado ha inyectado recursos y financiamiento a actividades poco productivas y que finalmente los beneficiados son las regiones próximas y ricas a las que subterráneamente les traspasan todos estos fondos. En estos estados la inversión externa es muy débil con apenas 3% y su índice de especialidad se retrajo a partir del TLCAN, con lo que perdió 0.25 unidades respecto a la especialidad promedio nacional en manufacturas. Debido a que son estados ricos en recursos pero pobres en producción, su fortaleza económica se compara con países africanos como Camerún y Yemen. Ya que son considerados como invaluables herederos y conservadores de la cultura mexicana ancestral, esta región puede desarrollarse en un nuevo marco ecoturístico y con fuerte vinculación dentro y fuera de la comunidad para que puedan conservar estas tradiciones y a su vez puedan transmitirlas a la gente curiosa y de mente abierta; además de que es posible iniciar programas de braceros que trabajen en la maquila de exportación (dadas sus capacidades motrices y sus habilidades manuales) por algún tiempo y luego regresen a su lugar de origen para que no pierdan contacto con su comunidad y adquieran nuevos conocimientos sobre el mundo actual.
Los estados turísticos mantienen un movimiento similar a los fronterizos ya que su actividad gira en torno al movimiento de personas que pasan un periodo vacacional en estas zonas; la actividad turística es fundamental para mover al resto de los sectores que se aferran a ella para tratar de vender productos a los extranjeros. La IED radica entre 12-15% y su especialidad en el área de comercio, restaurantes y hoteles creció en 1.5 unidades, arrastrando así actividades complementarias como la artesanía, la elaboración de alimentos y bebidas y los textiles. Su fortaleza económica se compara con países también dependientes del turismo como Bolivia y Costa Rica.
Los estados que cuentan con materias primas se han especializado en su usufructo y han adquirido un respetable catálogo de productos elaborados con calidad y a la vanguardia de la tecnología utilizada en países del primer mundo. En esto países la entrada de capitales ha sido muy limitada ya que abarca entre un 6-8% de la nacional, pero su especialidad alcanzó 2.85 unidades arriba para la rama minera, 3.45 unidades para la rama agropecuaria y 0.50 unidades para la manufacturera, siendo sus principales actividades la extracción y transformación de la madera (muebles), la extracción y transformación de minerales preciosos (oro, plata), la siembra y cosecha de hortalizas, cereales y frutas de temporal. Su fortaleza económica se compara con países de poco peso como Panamá y Mozambique.
Con esto se demuestra la disparidad regional, que si bien ha disminuido respecto a épocas pasadas y a la concentración de actividades, aún es muy amplia en cuestión a diferencia de ingresos y rentabilidades. Las regiones ricas que atraen recursos humanos y extraen los naturales de la regiones pobres favorecen esta condición, pero el gobierno tiene mucho que decir y más que hacer para evitar concentraciones y favorecer un desarrollo parejo en todo el agregado nacional.
Es necesario enmendar el camino en tres aspectos, el primero es la visión macroeconómica, ya que debemos de reconocer las fallas del modelo, las limitaciones del Tratado de Libre Comercio, y las desregulaciones que han venido a afectar el aparato económico; es urgente hacer reformas estructurales sobre las privatizaciones para tener un mayor control de los mercados, reformar el sistema educativo para que sea una enseñanza de calidad y con aplicabilidad contemporánea, además de reformar el sistema financiero para evitar la salida masiva de capitales y para regular los préstamos light que se ofrecen a pasivos incumplidos, y reformar el sistema fiscal para que se abarque al subempleo, así como también reformar el sistema jurídico y de seguridad social para que también abarque al subempleo y a la subcontratación. Segundo en el ámbito territorial, se debe contemplar de inmediato a las capacidades productivas locales y al espacio económico en cuestión, antes de hacer acciones que tienen repercusiones o limitaciones, para que así las políticas públicas tengan un efecto real inmediato y de largo plazo; a su vez que se debe descentralizar la autoridad y delegar las acciones a los grupos o instituciones con mayor eficacia para llevar a cabo estas acciones. Tercero en el ámbito microeconómico, se debe fomentar las cadenas productivas al interior del país no con el fin de abarcar más sino de especializarse en aquellas donde se tengan ventajas competitivas.
Las principales teorías del crecimiento regional
El objeto de este apartado es revisar las principales teorías que han dado hincapié al espacio económico como una variable de dimensión que hay que considerar al proponer políticas económicas.
Los territorios en general poseen ventajas geográficas, tales como recursos naturales, artificiales, humanos, los cuales permiten el desarrollo social y económico de esa región. Un espacio económico se construye a partir de las interacciones comerciales, sociales, culturales, etc. que existen entre ambas y su grado de complementación. Cuando una región se integra y se especializa en alguna actividad, se dice que esta región ha avanzado en la escala económica y si es capaz de competir a nivel global con regiones análogas, entonces la región se vuelve competitiva.
A continuación se exponen las teorías espaciales de Perroux, Myrdal, Marshall, Shumpeter y Krugman; tratando de armonizar en una teoría general aplicable a nuestro país.
a) Teoría de los polos de crecimiento
La teoría de los polos de crecimiento nos habla de dos tipos de industrias: aquellas que son motrices para el desarrollo de una región, también consideradas como básicas para la industrialización; y aquellas consideradas complementarias y que son base para que las primeras crezcan y permanezcan en la competencia global. Cuando una región invierte recursos para fomentar una actividad motriz entonces esta región crece y envía un derrame económico al resto de la región por medio de excedentes dinerarios que pronto se convierten en recursos para fomentar las actividades complementarias.
El crecimiento de las actividades “complementarias” (definidas como aquellas que están orientadas exclusivamente al mercado local de consumo final e intermedio) depende inicialmente del ingreso generado por las actividades exportadoras o básicas y, por ende, de la demanda externa. Por lo tanto, se asume que las actividades no básicas tienen un papel pasivo en la promoción del crecimiento económico. La teoría de la base económica sostiene que la producción para el mercado local sólo puede aumentar si se incrementa el ingreso local, y éste puede crecer sólo si la demanda total externa de la producción crece, de modo que el cambio exógeno necesariamente sólo puede ocurrir en el sector exportador.
El argumento sostiene que el desarrollo de las industrias motrices regionales depende de las ventajas comparativas de la región, reflejadas en los costos relativos de producción y transferencia; así como del ingreso (mercado) de las regiones adyacentes. Es decir, una región crecerá en la medida en que sus industrias motrices puedan competir en otras regiones. Por lo tanto, en la medida en que los costos de la industria motriz dependen substantivamente de las actividades complementarias estas últimas necesariamente desempeñan un papel clave en el crecimiento potencial de la región—en relación con las importaciones, es posible que los precios de insumos industriales y bienes de consumo final se reduzcan si se producen localmente, y la reducción del precio de estos últimos, además, permitirá reducir los salarios locales. Desde esta perspectiva, el desarrollo de las actividades complementarias (agropecuarias, semi-industriales y de servicios) es necesario para sostener el crecimiento de la base exportadora, y por ende de la economía regional, en el largo plazo.
El tamaño de la región, en términos de población, condiciona la importancia del comercio externo versus el comercio interno, en la promoción de su crecimiento. En general, se sostiene que a medida que aumenta el tamaño de la región, su comercio interno adquiere mayor importancia y, en consecuencia, disminuye la relevancia de las exportaciones.
Cuando una región crece, se desarrolla y se vuelve rica, es a costa de la precarización de otras regiones ya que absorbe su población, sus recursos naturales e incluso parte de sus actividades económicas; es por ello que las regiones periféricas deben buscar actividades que se vinculen y complementen al crecimiento de la región central, esto con el efecto positivo de generar empelo, recursos y especialidades, de lo contrario la región solo se hace más pobre y tiende a desaparecer.
El modelo de causación circular-acumulativa representa una línea de pensamiento cuyo argumento central postula que las fuerzas del mercado tenderán a ampliar las diferencias entre regiones avanzadas y rezagadas en cuanto a sus tasas de crecimiento. Se argumenta que en el proceso de desarrollo nacional, las regiones que tienen ventajas iniciales (recursos naturales, nodos de transporte, mercado potencial, centros administrativos, etc.) experimentan un crecimiento más rápido que el resto de la nación; y que a su vez, la acumulación industrial y el desarrollo de infraestructura en localidades avanzadas generan importantes economías internas y externas potenciales, que implican reducciones en costos para la operación de las empresas. En la medida en que aumentan las economías que las empresas pueden aprovechar en esas localidades, se estimula también el crecimiento económico de las mismas, y así el proceso se vuelve auto-reforzante. En contraste, de acuerdo a este argumento, el ritmo de crecimiento de las regiones rezagadas tenderá a desacelerarse, ya que sus ventajas limitadas (mano de obra barata) no son suficientes para hacerle contrapeso a la atracción ejercida por las ventajas de las regiones avanzadas.
El argumento central sugiere que el crecimiento de las regiones rezagadas es, en gran medida, un efecto inducido por el crecimiento de las regiones industrializadas. Por un lado, existe un efecto favorable que se transmite a través de la demanda —de las regiones industrializadas— por la producción (típicamente de productos primarios) de las regiones rezagadas, así como mediante derramas en forma de inversiones y difusión de innovaciones. La absorción de la mano de obra excedente de las regiones rezagadas por las áreas industrializadas, también produce un efecto favorable en la medida en que contribuye a elevar el ingreso per cápita de las primeras. Por otro lado, los efectos adversos se relacionan con la migración de población capacitada y joven, al igual que del escaso capital, de las regiones rezagadas a las industrializadas. Durante periodos bastante prolongados, se argumenta, el saldo neto será negativo para la mayoría de las regiones rezagadas. Por lo tanto, la conclusión obligada es que, si el desarrollo de una economía nacional es regido únicamente por las fuerzas del mercado, este se caracterizará por un proceso de crecientes desequilibrios en la escala regional.
El proceso se repite sucesivamente a niveles crecientes resultando en una ampliación constante de la brecha entre regiones de crecimiento rápido y de crecimiento lento. Aquí, los rendimientos crecientes a escala (equivalentes a las economías de aglomeración) son el elemento clave que conduce a una creciente concentración espacial de la actividad económica. Es claro que la teoría de la causación acumulativa apunta hacia un proceso de desequilibrio interregional, el cual se refleja en el constante flujo neto de recursos productivos hacia las regiones de mayor rentabilidad.
c) Teoría del Nuevo Distrito Industrial
El enfoque del Distrito Industrial de Marshall, se basa la localización de agentes dada la disponibilidad de recursos (insumos locales), los costos de transporte y la accesibilidad al mercado; las nuevas teorías agregan la facilidad con que estos agentes pueden exportar y la capacidad interna de absorber la transferencia de conocimientos, además de otros factores que tienen que ver con los costos como es la logística, la infraestructura y la entrada de insumos móviles de bajo costo. Para Marshall, el tamaño de mercado local era vital para soportar la estructura económica, y por ende el crecimiento económico local; a mayor población mayor mercado, mayor infraestructura urbana, y mayor elasticidad del precio ingreso de la demanda. Las firmas localizadas en estos mercados cuentan con mayor mano de obra que hace bajar la base salarial a su vez que aumenta la productividad, y bajo este crecimiento, también aumenta la oferta de bienes de capital que permite industrializar a la región.
La introducción del espacio implica la existencia de costos asociados con la reasignación de factores de producción, con el movimiento de mercancías, y con la transmisión de información. El modelo de las aglomeraciones, además de los movimientos interregionales de factores del enfoque neoclásico, incorpora también las economías de aglomeración (tendencias de crecimiento desequilibrado), y también un factor de distancia inter- e intraregional. Plantea que el crecimiento económico regional está relacionado con la oferta de los insumos o factores productivos y con los cambios tecnológicos. Tiene sin embargo, una importante característica estructural distintiva, consistente en que el rendimiento de la mano de obra y del capital depende del nivel de las economías de aglomeración. Al respecto, específicamente se asume que las tasas salariales y los rendimientos al capital se relacionan positivamente con el tamaño de las aglomeraciones urbanas, lo cual conduce a un crecimiento interregional e intraregional desequilibrado.
Se asume también que las economías de aglomeración influyen en la transmisión de los cambios técnicos. Al respecto, se plantea que la difusión del progreso técnico se relaciona de manera directa tanto con el tamaño del área urbana dominante de la región como con el grado de integración del sistema urbano regional o “economías de aglomeración en común”. Por otra parte, se plantea que el factor distancia se relaciona inversamente con el progreso técnico de la región, es decir, la distancia tiene el efecto de desacelerar la difusión del progreso técnico y la migración de mano de obra. Así, según este esquema, los diferenciales interregionales en tasas salariales y en rendimientos al capital, así como en el tamaño absoluto del acervo de capital en realidad podrían reforzar o contrarrestar la tendencia de crecimiento desequilibrado inducida por los factores de aglomeración. El resultado final es entonces una cuestión empírica.
La concentración económica surgida por las economías de aglomeración se da gracias a los rendimientos del mercado; pero conforme avanza el crecimiento, las economías se agotan y su localización se hace menos rentable y menos deseable; el uso de suelo escasea y se vuelve más costoso adquirir terrenos estratégicos, es cuando la población comienza a extenderse a los suburbios. La diferencia de renta hace que las actividades primarias se vuelvan menos rentables que actividades semi-industriales y servicios de primera necesidad: transporte, comunicación, comercio, vivienda, etc.; es cuando surgen los grandes monopolios que absorben todos los beneficios.
Por otro lado, Marshall pone de manifiesto que dentro de una rama industrial, es elemental el cambio técnico y organizacional que se dan a nivel inter-firma e intra-firma; además reconoce la importancia del aprendizaje en el proceso de formación del conocimiento, y su ambiente innovador en donde los productores pueden alcanzar altos niveles de conocimiento tecnológico. Para Marshall y después para Shumpeter, los principales mecanismos de transferencia de conocimiento son las relaciones cliente-proveedor tanto por medios formales e informales, estas relaciones enriquecidas por un ambiente innovador y dinámico en el cual el gobierno debe actuar con determinismo y autoridad.
Las regiones provistas para desarrollar sistemas de innovación tienen elementos centrales como organizaciones comunicativas y autónomas intra-firma, relaciones fuertes y dinámicas inter-firma, un papel protagónico del Estado y su amplia división jerárquica, además de las instituciones financieras, centros de investigación y vínculos entre Universidad-Empresa.
d) Teoría de los Rendimientos Crecientes
El argumento neoclásico sugiere que el capital y la mano de obra tenderán a migrar de las regiones de baja rentabilidad hacia las de rentabilidad mayor. En consecuencia, se sostiene que las diferencias interregionales en tasas de crecimiento son, en gran parte, resultado de los diferenciales interregionales en tasas de rentabilidad del capital y la mano de obra (que a su vez determinan la oferta regional de esos factores), y de la movilidad geográfica de esos factores. Al respecto, se asume que las empresas (capital) buscarán localizarse en regiones donde su rentabilidad sea relativamente alta. De forma análoga, se propone que la mano de obra migrará hacia donde su rendimiento esperado sea el mayor. El rendimiento esperado de la mano de obra considera además del salario real, ajustes en calidad de vida y la probabilidad de encontrar trabajo.
En un extremo, no se espera que las industrias con orientación al mercado local, una vez que se han hecho ajustes por el tamaño del mercado, migren en busca de una mayor rentabilidad, ya que en esas industrias los diferenciales de rentas entre regiones no varían sustancialmente. En este tipo de industrias los precios de los insumos, en particular la mano de obra, y de sus productos, son determinados por los mercados locales, y dado que el capital requerido para ingresar es relativamente bajo, la competencia rápidamente elimina rentas anormales. En el otro extremo, los diferenciales interregionales de renta son substanciales para las industrias de exportación, pues en industrias que sirven principalmente mercados nacionales la demanda y el precio del producto se determinan en mercados nacionales, mientras que el precio de los insumos, principalmente mano de obra, se determina localmente y, por lo tanto, puede variar de una región a otra. Es esta variación regional en el precio de los insumos, la cual implica rentas diferenciales, la que induce los flujos interregionales de capital, y por ende, los desplazamientos de producción y empleo. Todas las industrias se encuentran en algún punto entre estos dos casos extremos. En cuanto a la movilidad de la mano de obra, el argumento neoclásico propone que variará dependiendo también de la edad y la educación del trabajador, entre otras características.
El establecimiento definitivo de la teoría del crecimiento endógeno regional se remonta a la obra de Romer. Ese trabajo, también desarrolla una prueba empírica para evaluar la respuesta (movilidad) de los factores de producción ante diferenciales interregionales de precio, y la relación entre la producción no agrícola y la proporción capital-mano de obra. Romer adjudica que la respuesta está en función de la tasa de innovación y transferencia de conocimientos que puede adquirir la región, pues son estas las que inducen a tener rentas económicas excedentes y productividades laborales más altas.
De suma importancia en el enfoque neoclásico es el postulado de convergencia. Este sostiene que los rendimientos al capital y a la mano de obra de las diferentes regiones convergerán en el largo plazo. El mecanismo de autoajuste parte de una situación de desequilibrio y, en general, propone que aquellas regiones con ventajas de costos atraen empresas a una tasa mucho mayor que la del resto de la nación y, por ende, experimentan tasas de crecimiento relativamente rápidas; sin embargo, prosigue, a medida que aumenta la concentración de empresas en esas regiones, los costos tienden a incrementarse progresivamente, lo cual implica que dicha tendencia locacional cesará cuando los costos de producción sean similares a los del resto de las regiones. Es decir, se alcanza una situación de equilibrio. Así, en general se asume que cualquier diferencial interregional en la tasa de crecimiento será eliminada con el tiempo. De igual modo, la mano de obra tenderá a migrar hacia regiones con salarios reales relativamente altos hasta que la tasa salarial sea igual a las de las otras regiones. En equilibrio, las tasas salariales y los rendimientos al capital serán iguales en todas las regiones.
La crítica al enfoque neoclásico se ha centrado en algunos de sus supuestos principales, entre otros los siguientes: demanda perfectamente elástica para la producción de la región; recursos perfectamente móviles; y disponibilidad de información perfecta para inversionistas y trabajadores respecto a los precios de los factores. Las críticas también han aludido a la asumida homogeneidad de las regiones, así como a la exclusión del territorio y los costos de transportación, lo cual en conjunto lleva a excluir el factor “aglomeración”, la teoría de la aglomeración que se revisa en seguida, sugiere que el rendimiento esperado de los factores de producción se incrementan más allá de su nivel promedio de remuneración, como efecto precisamente de la aglomeración. No obstante, el modelo neoclásico permite considerar la posibilidad de que las regiones de salarios altos atraigan no sólo mano de obra sino también capital. Para tal efecto, se puede permitir que la función de producción de la región de salarios altos especifique rendimientos crecientes (debidos en parte a las economías de aglomeración), o introducir múltiples sectores y permitir cambios en la demanda a favor del producto de exportación de la región de salarios altos. El modelo también se puede diseñar para tomar en cuenta las fricciones territoriales y los costos no económicos que inhiben la migración en el contexto de inversión en capital humano, la mano de obra sólo se moverá si la tasa de rendimiento esperada es superior a los costos de desplazarse.
e) Teoría de la Nueva Geografía Económica
Al igual que los enfoques de la causación acumulativa y de las aglomeraciones, el enfoque de la Nueva Geografía Económica, desarrollado por Krugman, también otorga un papel central a las economías de aglomeración en el desarrollo del patrón regional del crecimiento económico. Sin embargo, el distintivo de este enfoque es que no hace supuestos sobre dichas economías, sino que las modela como una interacción, en el mercado, entre (i) economías de escala (a nivel de la empresa), (ii) costos de transporte y (iii) movilidad de los factores productivos. En otras palabras, evita el tradicional supuesto de que los rendimientos crecientes son puramente externos a la empresa —el cual a su vez permitía asumir competencia perfecta— y modela la estructura de mercado a nivel de la empresa individual.
El modelo básico, por una parte, asume una economía de dos sectores: manufacturas con rendimientos crecientes a escala, y agricultura con rendimientos constantes; solo para las manufacturas hay costos de transporte. Por otra parte, asume que solo hay dos factores de producción: obreros que trabajan en el sector de manufacturas y que pueden migrar de una localidad a otra, y agricultores que producen bienes primarios y no emigran; los factores no pueden cambiar de sector. Se asume también que los obreros tenderán a migrar de localidades con salarios reales inferiores al promedio hacia aquellas con salarios reales por arriba del promedio (no se modela explícitamente la decisión de migrar). Así, bajo este esquema, la distribución geográfica de los obreros es la que evoluciona a través del tiempo, mientras que la de agricultores es exógena.
En el modelo de dos regiones, la concentración de todos los obreros en la región 1 representará un equilibrio si para una empresa individual no es rentable producir en la región 2. Son varios los elementos que intervienen. Por una parte, en la región 2, la empresa tendrá que ofrecer mayores salarios para poder atraer a los obreros, dado que virtualmente todas las manufacturas son importadas. Por otra parte, los costos de transporte serán una ventaja para las ventas de esta empresa en la región 2, pero una desventaja para sus ventas en la región 1 (el mercado más grande). Por lo tanto, la rentabilidad en la región 2 dependerá del diferencial tanto en el valor de las ventas como de los costos fijos (tasa salarial) entre ambas regiones.
Son tres los parámetros que en este modelo determinan esos diferenciales, y por lo tanto, la tendencia hacia la concentración o la desconcentración: la participación de las manufacturas en el gasto, los costos de transporte, y la elasticidad de sustitución entre productos manufacturados (que representan economías de escala). En el esquema de dos regiones, una mayor participación de las manufacturas en el gasto implicaría menores ventas para la empresa localizada en la región 2, dado que el tamaño relativo del mercado intermedio y de consumo final será mayor en la región 1. Esta es la llamada fuerza centrípeta que favorece la aglomeración. Por el contrario, si es pequeña, las empresas venderían únicamente en los mercados rurales dispersos. En este caso, siempre sería conveniente para las empresas alejarse de cualquier concentración de manufacturas, con el objeto de evadir la competencia. Esta es la fuerza centrifuga que contrarrestaría la aglomeración. En general, se asume que un proceso de creciente concentración (divergencia) es más probable cuando el gasto es grande, debido a las fuertes cadenas productivas hacia atrás y hacia delante que ello implica. Esto valida el conocido argumento de que la aglomeración emerge debido a la relación circular que se da entre la localización del mercado y la localización de la producción manufacturera.
Respecto al papel de los otros parámetros, en el esquema de dos regiones, un costo de transporte elevado hará rentable para la empresa moverse de la región 1 a la 2; es una mejor opción que producir en la primera y transportar el producto a la segunda. En general, se asume que la concentración (divergencia) es más probable cuando el costo es bajo y a medida que crece, se llegaría a un punto en que la concentración geográfica de la producción no sería sostenible. También se asume que la concentración (divergencia) será contrarrestada por una elasticidad de sustitución alta (economías de escala débiles). Por lo tanto, en la medida en que los rendimientos crecientes a escala se fortalezcan, la producción de cada bien tenderá a concentrarse.
Por otra parte, dado que ha combinado las ideas de la causación acumulativa y el lugar central en formas muy innovadoras. Krugman redescubrió los factores de localización que en dicha área de estudios han sido descartados o disminuido en importancia, en particular los costos de transporte. Sin embargo, el propósito del modelo de Krugman es derivar factores generalizables que expliquen el patrón regional o geográfico del desarrollo industrial en el siglo XIX, y que aún en la actualidad son responsables por el agrupamiento espacial de muchas industrias.
La planeación regional en el mundo
La planeación regional es un tema muy discutido en las esferas de intelectuales, ya que concierne a sociólogos, economistas, politólogos, geógrafos, urbanistas, internacionalistas y todas aquellas personas concernientes a los estudios de la sociedad. La integración social no es cosa fácil y mucho menos cuando existen diferencias étnicas, culturales y sociales que pueden desalentar la integración. En este marco examinamos dos regiones con un alto poder económico y que han sufrido conflictos bélicos al interior de sus economías, pero que con mayor o menor eficacia han integrado dentro de sus acciones incluir una agenda destinada a la planeación regional y a aplicar políticas para favorecer el desarrollo de comunidades atrasadas. Es el caso de la Unión Europea la cual tiene más de 50 años intentado integrarse como supra nación y que ha conseguido los mejores resultados en cuestión a distribución del ingreso y desarrollo económico sustentable; el otro caso es China quien tiene la mayor tasa de crecimiento económica pero que sufre de un constante crecimiento desequilibrado.
a) Unión Europea
La política de la Unión Europea se basa en la solidaridad financiera y la ayuda mutua, ya que los estados miembros transfieren parte de su ingreso en la cooperación de los estados más pobres; entre 2000 y 2006 éstas alcanzaron una tercera parte del presupuesto comunitario, los cuales se dividieron en Fondos para el Desarrollo Regional Europeo, el cual basa sus recursos para fomentar las actividades en la regiones pobres; el Fondo Social Europeo, el cual fomenta ayuda a las regiones necesitadas a proveer productos y servicios hacia las regiones ricas, además de que capacita y fomenta el empleo de calidad; el Fondo de Cohesión, abarca el financiamiento a comunidades y la promoción de actividades industriales con su creciente incorporación al mercado europeo; algunos otros fideicomisos abarcan la inversión en actividades agrícolas, ganaderas y pesca.
Los Fondos estructurales tienen 3 objetivos en común:
- 70% de los créditos es para recuperar las regiones menos avanzadas que representan el 22% de la población.
- 11.5% de los créditos es para apoyar la reconversión delas zonas con dificultades estructurales, abarca el 18% de la población.
- 12.3% de los créditos favorecen la modernización de los sistemas de formación y fomento al empleo.
Además de los Fondos, existen acciones innovadoras que pretenden mejorar el desarrollo local, tal como el Instrumento de Pre-adhesión el cual estimula a los países que quieren formar parte de la Unión Europea para que se industrialicen, fortalezcan su moneda y adquieran mayores capacidades exportadoras; también el Instrumento Equal con el cual se busca la igualdad en las relaciones de trabajo y la no discriminación ya sea por motivos raciales, étnicos o de género; el Instrumento Interreg III sirve para comenzar a cooperar de forma transnacional aunque no sea parte de la Unión, siempre y cuando esté vigilada y controlada por las autoridades federales o locales y no contravenga a los intereses de la Confederación o afecte el comercio de otras regiones internas.
La integración en la Unión Europea ha sido exitosa, bajo ciertas excepciones, porque los territorios con desventajas han aprendido la nueva lógica económica y están dispuestos a competir con marcas y productos innovadores y que cumplen las más altas normas de calidad. Esto ha favorecido la integración económica y social y ha resaltado la importancia de mantener un crecimiento equilibrado en todas sus regiones económicas, ya que la disparidad ha disminuido el conjunto confederal puede acceder a nuevos mercados sin la preocupación de afectar a regiones. Es importante resaltar que la política exterior de la Unión Europea, favorece los intereses de estas regiones incipientes, pues las protege de rivales muy fuertes, a través de barreras arancelarias y no arancelarias, es decir protege su industria con muchas trabas a la importación ya sea en cuestión a calidad, estándares más elevados que los internacionales, etc. y con esto favorece el comercio intraregional y el crecimiento sectorial.
b) China
La política de China ha sido favorecer Zonas Económicas Exclusivas (ZEE), las cuales se ubican en los principales puertos comerciales y cuentan con infraestructuras sumamente complejas dignas de primer mundo; tienen ventajas fiscales y administrativas gracias al buen manejo de sus instituciones, y cuentan también con una red de transporte multimodal que les permite virar hacia varias direcciones y hacia los lugares exclusivos donde están instaladas las maquilas de exportación. Este nuevo modelo de desarrollo es con el que China ha alcanzado la mayor integración de redes globales de producción y el que ha absorbido la mayor inversión externa junto con sus efectos multiplicadores sobre el ingreso y el empleo.
Frente a esto la región céntrica y occidental de China sigue muy rezagada a sus actividades primarias, comparativamente son personas con un nivel de vida similar al de un país atrasado y ni la inversión externa ni la pública han logrado estimular estas regiones. Esto es un grave problema que pareciera no importar demasiado puesto que la política seguirá vinculada a aquellas regiones dinámicas y con altas capacidades de integración y desarrollo, que favorecen la actividades industriales de punta; y lo que se busca es integrar a las regiones pobres con sus actividades a partir de la innovación tecnológica para que la industria y la agricultura puedan alcanzar un desarrollo sostenible y sustentable.
La planeación regional en México
El análisis general de los nexos entre teoría y objetivos e instrumentos de política, efectuado en el apartado anterior, provee el marco analítico para deducir los principios teóricos de la política industrial regional orientada hacia la desconcentración y el impulso de áreas periféricas (impulsada durante los setenta y hasta inicios de los ochenta); de la erradicación de dicha política y el dominio del mercado en la asignación interregional de recursos a partir de la segunda mitad de los ochenta; y de la política actual (impulsada desde inicios de los noventa), que pretende fortalecer la competitividad regional, promoviendo el desarrollo de sistemas productivos locales y la integración de la pequeña y mediana industria.
El propósito central es contribuir a la aplicación de una planeación regional y la gestión pública local en México, abandonando la gastada política sectorial y la abdicación del gobierno a conducir la planeación urbana y regional de manera limitada; y pasar a una política regional con enfoque planificador, esclareciendo así que los objetivos y la acción son comunes y colectivos tanto de los instrumentos de la política industrial como de lo regional.
a) Los rasgos de la política regional y el objetivo de desconcentración
Desde 1970 y hasta inicios de los ochenta se construyo un amplio sistema de planeación y programático, y se aplicaron considerables recursos para impulsar la desconcentración económica de la Zonas Metropolitanas de la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara hacia la extensa periferia del país y en especial hacia las ciudades medias. Uno de los instrumentos centrales fue la aplicación de un esquema regionalmente diferenciado de incentivos fiscales y financieros, así como de subsidios al precio de servicios públicos y energía, para las empresas. Bajo este esquema, los mejores incentivos se otorgaban en las regiones que se pretendía impulsar, mientras que las grandes aglomeraciones urbano-industriales invariablemente eran excluidas.
Las principales ciudades en los que el gobierno federal, estatal y local actuaron de forma armónica, y con esto lograron instaurar importantes parques industriales que dieron empleo directo a miles de personas, e indirecto a cientos de proveedoras. El caso por excelencia es el complejo automotriz ubicado en Guanajuato con la instauración de la General Motors, Aguascalientes con Nissan, Hermosillo con Ford, Puebla con Volks Wagen, Tijuana con Toyota, y Guadalajara con Honda. También hay que destacar la industria electrónica con los clústers de Guadalajara en donde se encuentra HP e IBM, Tijuana donde se localizan Sony y Samsung, Mexicali con Kodak y Hitachi, y Ciudad Juárez con Siemens y Philips. Y por último los parques industriales abocados a la industria textil como son León con Flexi y Export, Tianguistenco con Arce y Johnson, y Puebla con Lee y Furor.
Las políticas públicas que se desarrollaron a fines de siglo dieron un importante paso en la elaboración de acciones locales y pero no lograron modificar la distribución económica que pernea dentro del territorio nacional. Los recursos obtenidos del federal, fueron usados por los estados y por los municipios para pagar sus gastos administrativos (aproximadamente un 45%), otra parte en forma de transferencias para pagar subsidios (30%) y lo último para hacer obras públicas (15%), el resto era pagos a la deuda pública y otros rubros. La calidad de vida relacionada con los estándares de educación, seguridad pública y salud fueron administrados por el gobierno federal a través de fondos de aportaciones; éstos impactaron de forma variable como en Baja California donde cada alumno de escuela pública recibe un monto de 9,338 pesos mensuales para material y recursos escolares mientras que uno de México recibe sólo 4,233 pesos; y frente a esto los docentes se multiplican para obtener su bono de eficiencia el cual asciende en México a 16,000 pesos, esto hace obvio el porqué crecen las plazas de personas que poco conocen su docencia y que perjudican el avance intelectual de los niños mexiquenses. Situación similar presentan los fondos destinados a la salud, a la seguridad social y a la infraestructura social.
La descentralización de actividades no se ha alcanzado como se tenía previsto; hace falta una mayor participación local y regional dentro de las actividades que impulsan el desarrollo, y el gobierno federal debe delegar esta autoridad a quienes más eficaces resulten en su aplicación. Por otra parte la descentralización no es recomendable cuando se presentan altos grados de corrupción y hay una desconfianza generalizada a los gobiernos estatales y locales; para evitar esto, existen instituciones que se encargan de medir la confianza del público y califican el desempeño político en función de sus acciones y los resultados alcanzados, el Instituto de Acceso a la Información Pública (IFAI) puede ser un portal para que la descentralización de actividades sea la esperada.
b) La política regional
Como objetivo de revertir los desequilibrios interregionales se diseñó una política dentro del Programa Nacional de Fomento Industrial y Comercio Exterior 1984-1988, básicamente, un reducido número de ciudades medias, ejes y corredores industriales es seleccionado para cumplir la función de centros de desarrollo: la llamada estrategia de “descentralización no dispersa”. El nivel de los estímulos fiscales y financieros a la inversión privada se establece en función de ese esquema: el estimulo era mayor si la inversión encajaba dentro de la especialización y funciones asignadas al centro respectivo. Este esquema de subsidios, junto con la inversión pública en infraestructura, y el poder de demanda de las industrias siderúrgica, petroquímica, y de equipo de transporte, entonces paraestatales, se concibieron como los principales instrumentos. Sin embargo, los recurrentes efectos adversos de la crisis económica de 1982 habrían de impedir la materialización de dicha estrategia. Por otra parte, las instancias de planeación local y coordinación intergubernamental utilizadas para asignar el gasto federal en los estados se mantuvieron vigentes, e incluso se establecen las bases constitucionales para fortalecer la capacidad fiscal de estados y municipios, así como su papel en cuanto a provisión de servicios.
En buen número de trabajos se ha observado como desde el inicio del periodo gubernamental 1988-1994, los esfuerzos consistentes en impulsar exógenamente el desarrollo de zonas económicamente deprimidas y descentralizar la actividad económica, desaparecen de la estrategia gubernamental de desarrollo. Esto ha implicado la reconfiguración de diversas instituciones públicas relacionadas con el fomento a la industria. A diferencia de la política regional de los setenta e inicios de los ochenta, en este nuevo enfoque no se considera el nivel de desarrollo de las regiones, no se contempla incentivos diferenciados de acuerdo al nivel de desarrollo de la región, ni objetivos de desconcentración.
Los documentos de planeación establecen que la política industrial se concentraría en promover el funcionamiento eficiente del mercado en la asignación de los recursos productivos, incluyendo su asignación interregional (Plan Nacional de Modernización Industrial y Comercio Exterior 1990-1994). Se plantea también la necesidad de dirigir los esfuerzos de estado en materia de promoción industrial principalmente hacia la Pequeña y Mediana Empresa (PyME) para apoyar aspectos de: investigación y desarrollo (I&D), acceso a mercado de capitales, y transferencia y asimilación de tecnología, entre los más relevantes, además del estimulo al aprovechamiento de los factores productivos del país, y el impulso a una cultura de internacionalización y calidad total.
Dentro de esta política industrial de impulso a la competitividad de la planta industrial y en particular de la PyME, la vertiente regional también plantea cambios sustantivos. El fomento al desarrollo de agrupamientos industriales y cadenas productivas, de carácter regional y sectorial, así como la integración amplia de las PyME a los mismos, se combina con otras políticas generales dirigidas a mejorar la oferta de infraestructura en comunicaciones y transportes, energía y otros insumos industriales básicos, las cuales contemplan una creciente participación del sector privado. Por otra parte, se proponen políticas relacionadas con la adecuación de la oferta del sistema educativo para fortalecer la capacitación y formación continua, y fomentar el acercamiento del sistema educativo y de investigación con la industria. La estrategia asigna un papel decisivo a las acciones inter-institucionales, coordinadas a nivel regional, en las que participen sector privado, gobiernos estatales, gobierno federal, y organizaciones semi-gubernamentales. Algunos esfuerzos desde la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial hasta la actual Secretaria de Economía, también han convergido en el propósito de contribuir a la modernización tecnológica, y de elevar la capacidad de aprendizaje de las PyME, a través de impulsar la cooperación inter-empresarial, el intercambio y la difusión de información, y el enlace con centros de investigación. Entre sus acciones más relevantes están las siguientes:
1. Red Nacional de Centros de Competitividad Empresarial (CRECE), cuyo propósito es prestar servicios y atención especializada (tecnológica, de gestión y de información) a la micro, pequeña y mediana empresa Asimismo, los centros regionales CRECE, uno en cada estado, prestan servicios de diagnóstico empresarial, evaluación de la posición competitiva de la empresa, identificación de áreas de oportunidad, y diseño de alternativas para elevar la productividad.
2. Proyecto de Desarrollo de Proveedores o Clientes de Base Tecnológica, que pretende fomentar la creación de redes de empresas para fortalecer las cadenas productivas, complementando los esfuerzos de NAFIN y BANCOMEX en este aspecto.
3. Comité Nacional de Productividad e Innovación Tecnológica (Compite), que asocia a consultores certificados para impartir talleres regionales de capacitación y estrategia, por ramas industriales.
4. Programa de Empresas Integradoras con el propósito de eliminar intermediarios y permitir a las empresas asociadas la adquisición de materias primas, insumos y activos tecnológicos en condiciones competitivas en cuanto a precio, calidad y oportunidad de entrega. Este programa otorga incentivos a la asociación de empresas para que bajo un esquema de cooperación se provean servicios especializados a los asociados, acceso a tecnología y financiamiento, promoción y comercialización, diseño de productos, y subcontratación.
Para 1996-1999 el nuevo programa de SECOFI junto con las autoridades estatales y municipales era la potencialización de los factores productivos locales, entre ellos el fortalecimiento de productos con base de exportación, pues el peso frente al dólar se recuperaba y permitía mantener las exportaciones fuertes , además de que China aún no entraba dentro de la Organización Mundial de Comercio y por tanto no era amenaza para abatir productos mexicanos en el exterior. El fortalecimiento del apoyo gubernamental vía inversión pública en infraestructura, cosa que hemos revisado no fue satisfactorio gracias a la fragilidad política y a los desajustes macroeconómicos antecesores. El desarrollo empresarial para fomentar la iniciativa privada y nacional, cosa que era incipiente para un país donde había dominado la autoridad central y la inversión pública. El desarrollo de capital humano, más que educativo, con opciones para avanzar su complementariedad intelectual en instituciones de calidad foráneas. Algunas de las medidas que se rescatan dentro de esas acciones son:
1. Acuerdos locales en la frontera norte, los cuales incluyen una “Bolsa de Subcontratación” la cual permite la promoción de negocios desde la subcontratación hasta acuerdos estratégicos entre grandes conglomerados y pequeñas proveedoras; esto desarrolla productos mexicanos, los hace avanzar en el sentido industrial y son integrados a las redes globales de producción.
2. Acuerdos de industrialización vía integración de clusters, los que cuales integran en una zona industrial a actividades motrices con complementarias; aquí también existe desarrollo de productos mexicanos y promoción empresarial por medio de la ingeniería en reversa y la transferencia de conocimientos, además de que la vinculación entre centros de desarrollo e investigación con empresas las hace sumamente dinámicas y competitivas.
3. Desarrollo empresarial en el Sur, donde es vital la conformación de un empresariado fuerte y dispuesto a llevar a la región a esquemas más industrializados sin comprometer la cultura arraigada. Programas públicos como Desarrollo de Empresas Integradoras, Tienditas, Financiamiento a la Modernización y los programas privados como Uniones de Crédito y Cámaras Industriales fomentan la participación colectiva para formar un negocio y mantenerlo.
4. Renovación del conglomerado del centro, el cual introduce un apartado sobre el cuidado al Medio Ambiente y favorece la reinversión y actualización de la maquinaria y equipo con controladores ambientales y se crea un fideicomiso para la PyME, así como la creación de zonas industriales integradas y bien comunicadas.
5. Especialización en las actividades más rentables; aquí se incluyen muchas regiones aptas para los servicios comunales y estatales, para el turismo o que tienen vocación para actividades primarias. El objetivo es que se integren a la nueva dinámica económica y que adapten sus recursos y sus aptitudes para crear actividades innovadoras con un sentido humano y con la visión de mantener el crecimiento sustentablemente.
En el importante aspecto de la modernización tecnológica el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) ha emprendido algunas acciones. Algunos de los 27 centros de investigación del Consejo, la mayoría de los cuales se localizan en provincia, han intentado establecer formas de cooperación con empresas locales, gobiernos estatales, y otras instituciones de investigación o formación técnica. Varios de esos centros en realidad cuentan ya con una trayectoria de cooperación a nivel regional y/o local. Otros esfuerzos del mismo CONACYT son el Programa de Modernización Tecnológica y el Fondo para el Fortalecimiento de las Capacidades Científicas y Tecnológicas. El primero otorga financiamiento parcial directamente a las empresas para proyectos de desarrollo tecnológico, y también patrocina a centros tecnológicos que apoyen en este aspecto a las PyME; el segundo, brinda apoyo técnico y financiero para crear, expandir, y fortalecer centros tecnológicos privados y del sector público. Ambos pretenden primordialmente mejorar el acceso de las PyME a los servicios tecnológicos, pero también fomentar una cultura de cooperación tanto entre empresas como entre estas y otros agentes de su entorno regional.
Las acciones arriba descritas han resultado a todas luces insuficientes frente a la magnitud de las necesidades financieras, de organización, y de acceso a tecnologías modernas. Se requiere una profundización en las políticas regionales y un concienzudo análisis a las políticas sectoriales, para que ambas con acuerdos y objetivos comunes compartan acciones y mejoren los resultados del crecimiento y el desarrollo sustentable regional; así como una mayor participación social en las actividades productivas y un nuevo y mejorado empresariado mexicano con visión de competir globalmente y la capacidad de innovar en el momento justo que se requiera; y finalmente una cooperación entre todos los sectores del gobierno, la empresa y las instituciones (financieras, educativas y civiles) para que colaboren con la mejora del bienestar social y económico.
Bibliografía y Hemerografía
1. ASUAD, Norman. Un ensayo teórico metodológico sobre el proceso de concentración económica para las principales macro-ciudades: Distrito federal, Guadalajara y Monterrey de 1994-2004. Tesis Doctoral. Facultad de Economía, UNAM. México 2007.
2. BOISER, Sergio. Estrategias del Desarrollo y Planificación en México. Economía de América Latina. CIDE. México, 1990.
3. CAPELLO, Roberta. Regional Economics. University of Kyoto. Estados Unidos, 2003.
4. CLAVIJO, Fernando. Las reformas económicas en México. Lecturas del Trimestre Económico No. 92. México.
5. CORDERA, Rolando. El cambio estructural en México 1982-2004. Revista Economía Informa No. 336. Facultad de Economía, UNAM. México, 2005.
6. DUSSEL, Enrique. Dinámica Regional y Competitividad Industrial. Ed. Jus. México, 1999.
7. GAZOL, Antonio. Diez años del TLCAN, una visión a futuro. Economía UNAM No. 3 Vol. 1. México, 2005.
8. JONES, Charles. Introducción al crecimiento económico. Pearson Education. México, 2000.
9. PERROUX, François. Los polos de desarrollo y la planificación nacional, urbana y regional. Ed. Nueva Visión. Francia, 1951.
10. RUIZ, Clemente. Dimensión Territorial del Desarrollo Económico de México. Facultad de Economía, UNAM. México 2005.
11. YANG, Qiumei. China and its regions. OECD Develop Center. China, 2000.
Páginas de Internet
1. http://www.pyme.gob.mx
2. http://www.energia.guanajuato.gob.mx/gaceta/Gacetaideas/Archivos/04052006_SISTEMAS_REGIONALES_INNOVACION.pdf
3. http://www.senado.gob.mx/comisiones/LX/desarrolloregional/content/foros/desarrollo_regional/Javier_Delgadillo.pdf
4. http://www.inegi.gob.mx/inegi/
TEORÍA Y POLÍTICA DEL DESARROLLO REGIONAL Y URBANO
9-ENE-09
Antecedentes
Durante los últimas dos décadas la política económica mexicana ha estado sesgada a dos rubros: política sectorial (industrial) y política macroeconómica (cambiaria, monetaria y fiscal); y estas no han jugado el rol esperado para llevar al país a un desarrollo económico sostenible y sustentable. En el presente ensayo se manifiesta la importancia que tiene para toda investigación el tomar en cuenta el espacio económico como un nuevo factor de producción, que determina las cualidades y ventajas de un cierto territorio frente a los demás.
El estudio se divide en tres partes, la primera hace una revisión general de las teorías que aplican al espacio económico, tomando en cuenta la importancia de éste término, y su utilidad hoy en día; la segunda parte hace una revisión general de las políticas nacionales, sectoriales y regionales que han aplicado ciertas economías como la Unión Europea, China y en especial México; terminando con una evaluación de la situación nacional y las propuestas para una mejor política económica nacional.
El objetivo de este ensayo es esclarecer la falta de una visión espacial para aplicar política económica, sobre todo política de desarrollo a nivel regional y urbano. Esta falta de perspectiva hace que las políticas sectoriales, fiscales, monetarias, etc. además de cualquier proyecto de fomento económico y social tengan repercusiones limitadas para la población objetivo o para el sector en específico al cual se quiere ayudar.
a) Historia Económica Nacional (1988-2004)
Al finalizar el Modelo de Sustitución de Importaciones y la entrada de políticas neoliberales en 1982, México era considerado una economía estable gracias al milagro acontecido durante los años 70s; sin embargo la década de los ochenta se considera perdida ya que las crecientes tasas de interés acrecentaron una deuda externa impagable y la tasa de inflación se multiplico hasta llegar a ser de 25%. El país cayó en una recesión que pronto se convirtió en estanflación e hizo devaluar al peso mexicano frente a las divisas internacionales: dólar.
Las políticas de privatización de empresas estatales y paraestatales como Televisoras, Teléfonos, Bancos, Líneas aéreas, etc. no sólo vino a consolidar el poder monopólica, sino acrecentó los precios; y junto a las políticas de liberalización comercial y la entrada primero pasiva de nuevas inversiones y nuevas empresas llevo al quiebre de la economía ya que se desempleo a una tercera parte de la población, los ingresos decrecieron y con esto sus efectos negativos no hicieron esperar. El gobierno mexicano tomo medidas extraordinarias para controlar la inflación, en especial en materia fiscal y monetaria, pero su mayor logro fue cuando se instauro el Pacto Social.
Respecto a la política monetaria y cambiaria, lo que se quería era inyectar recursos provenientes de fuera y para esto el gobierno era el único capaz de sostener dicha tasa de interés, también promovieron créditos mediante los flujos monetarios con un nulo encaje legal con el fin de incentivar la liquidez en la economía y a su vez el tipo de cambio lo mantuvieron flotante con barras estabilizadoras que corregían el déficit en balanza de pagos de manera casi inmediata. La política fiscal de la misma manera incentivaba la inversión directa mediante la condonación de impuestos y aranceles a empresas maquiladoras de exportación.
Las reformas de primera generación (1982-1988) aumentaron los flujos de inversión directa extranjera (IED), descentralizaron al gobierno del ingreso petrolero ya que incrementaron las exportaciones de maquilas ubicadas en la frontera norte del país, a su vez que el coeficiente de importación se triplicó. Por el lado financiero, las tasa de interés quedaron al libre juego de mercado y los bancos ahora privatizados, buscaron obtener financiamiento externo, subiendo las tasas líderes de referencia, teniendo como respaldo de pago al gobierno federal y su seguro financiero: FOBAPROA.
Iniciados los años noventa, la economía resentía las reformas estructurales y sobre todo estaba inmersa en un ambiente de incertidumbre; por un lado el sistema electoral no garantizaba la plena democracia y por el otro el movimiento de las tasas de interés y de los tipos de cambio eran erráticos (gracias a esta incertidumbre), por lo que el choque no se hizo esperar y en 1994 fue cuando inversionistas nacionales y extranjeros sacaron del país millones de dólares (gracias a que la inversión no estaba controlada y los bancos al ser privados no se les pudo contener). La crisis fue de tal magnitud que llevo a una inflación del 50%, las tasas de interés eran extremadamente altas y el tipo de cambio era tal que se tuvo que devaluar drásticamente la moneda para poder subsanar el déficit público y la balanza comercial. A la alta inflación se le agregó la falta de liquidez en la economía y con esto más de la mitad de la población fue arrojada al umbral de pobreza y a una caída del producto inimaginable.
A pesar de lo anterior, la crisis se superó rápidamente y los niveles de déficit en balanza de pagos fueron absorbidos por el superávit en balanza comercial gracias al encadenamiento provisto por el TLCAN hacia los EE.UU y las exportaciones a este país (debido a la devaluación del peso que hace crecer las exportaciones). La economía mexicana creció sin crédito bancario, la volatilidad de los tipos de cambio y tasa de interés fue aún latente en épocas posteriores, y de las empresas nacientes lograron sobrevivir aquellas vinculadas al aparato exportador. Este evento dejó en claro que las políticas neoliberales eran contradictorias en el sentido de progreso nacional, ya que perjudicaron al bienestar social y al sistema económico nacional, pues después de todo se demostró que México era frágil frente al escenario global y no dejaba de tener un impactos respecto a lo que acontecía en el vecino del norte.
Frente a esto, para 1998 era claro que la maquila de exportación era una economía de enclave para aquellas regiones favorecidas y que además de generar empleo en cualquiera de su modalidad (formal o subcontratada) hizo crecer la migración campo-ciudad ya que el TLCAN sacrificó a casi todas las actividades agrícolas a cambio de que se modernizara la planta productiva nacional. La migración llegó a su punto más alto cuando se contabilizó la mayor partida de connacionales al país del norte en busca de nuevas y mejores formas vida, alrededor de 10 millones de personas en ese año, éstas provenían de las regiones dedicadas a la agricultura y por el TLCAN habían sido desfavorecidas.
Las regiones favorecidas por el tratado y que lograron integrarse en economías de enclave fueron: Tijuana, Baja California; Mexicali, Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; Chihuahua, Chihuahua; San Luis Colorado, Sonora; Nogales, Sonora; Hermosillo, Sonora; Torreón, Coahuila; Monclova, Coahuila; Piedras Negras, Coahuila; Nuevo Laredo, Tamaulipas; Reynosa, Tamaulipas; Matamoros, Tamaulipas; Monterrey, Nuevo León; La Paz, Baja California Sur; Guadalajara, Jalisco; León, Guanajuato; Querétaro, Querétaro; Cancún, Quintana Roo; Acapulco, Guerrero; entre otras. Las regiones afectadas por el tratado y especialmente dedicados a actividades primarias fueron: Zamora, Michoacán; Uruapan, Michoacán; Irapuato, Guanajuato; Celaya, Guanajuato; Arandas, Jalisco; Tepic, Nayarit; Colima, Colima; Córdoba, Veracruz; Martínez de la Torre, Veracruz; Cardel, Veracruz; Tehuacán, Puebla; Huamantla, Puebla; Oaxaca, Oaxaca; Chilapa, Guerrero; Comitán de Domínguez, Chiapas; entre otras.
A partir de 2000 se comenzó a direccionar la política comercial externa hacia otras latitudes que no fueran EE.UU., especialmente se quería exportar productos hacia Europa y Japón, y aunque se han elaborado acuerdos comerciales que permiten ciertas mercancías, los mexicanos no han podido sobrepasar la calidad requerida para satisfacer esos mercados; del lado de la inversión, tampoco se ha descentralizado ya que los mismos japoneses reconocen a México como un país con grandes cualidades para establecer sus transnacionales pero se deben fortalecer los encadenamientos internos que provean de insumos a estas grandes compañías. Actualmente la competencia con China, India y Brasil ha sido a favor de ellos y es muy posible que en los próximos años se pierdan muchas empresas maquiladoras para reubicarse en esas zonas, pero si se compromete a emprender acciones para fortalecer cadenas productivas y para generar productos de mayor calidad y valor agregado, es posible lograr exportar productos con baja elasticidad precio y líderes en su ramo; en algunos ramos ya se ha conseguido aunque más que limitaciones técnicas del producto, son las barreras no arancelarias las que protegen a los países desarrollados.
b) Disparidades regionales y el desarrollo alcanzado
El apartado productivo nacional se vincula con el desarrollo regional, a partir de que son las actividades sectoriales aquellas que mueven un territorio; y son la interdependencia de actividades las que vinculan dos territorios y conforman un sistema regional. El país cuenta con un sinfín de localidades que se entrelazan y comunican entre sí para formar actividades y esto se configura para constituir una región. Según el Dr. Clemente Ruiz Durán, existen 7 macro regiones al interior del país, que según se forman dadas sus características comunes, sus actividades motrices y complementarias, y sus vínculos comerciales y sociales, estos son:
Frontera: Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
Reconversión Industrial: Jalisco, Aguascalientes, Querétaro, Guanajuato y San Luis Potosí.
Centro: Distrito Federal, México, Puebla, Morelos, Tlaxcala e Hidalgo.
Petroleros: Veracruz, Campeche y Tabasco.
Sur: Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Turísticos: Yucatán, Quintana Roo y Baja California Sur.
Materias Primas: Sinaloa, Nayarit, Durango, Michoacán, Colima y Zacatecas.
Las disparidades que existen entre estas regiones son visuales y generales; las que mencionamos son causa por la especialidad a la que se han dedicado, o puede ser causa de la falta de organización y política industrial; pero hay que mencionar que cada región tiene concentraciones y disparidades hacia dentro y que son las actividades motrices y complementarias las que dan sentido de estudio para que se comporten así.
Los estados fronterizos están ligados a la economía de EE.UU. de manera umbilical, lo cual son fuertes exportadores de productos maquilados y su crecimiento depende del crecimiento del país vecino. El peso de la inversión externa radica en un 30-35% de la nacional y su índice de especialidad en manufacturas ha subido 1.25 unidades, especialmente en las industrias: eléctrica-electrónica, automotriz, textil y metálica básica. Su fortaleza económica se puede comparar con países latinoamericanos de relevancia como Paraguay y Ecuador.
Los estados de reconversión industrial, han creado infraestructura social para que empresas transnacionales se ubiquen allí, de tal forma que se forman clústers de actividades que mueven al resto de la economía regional; a cambio de la Inversión Directa que reciben, ellos condonan impuestos locales y federales además de que su infraestructura les permite gozar de ventajas de localización. El peso de la inversión externa abarca entre un 12-15% de la nacional y su especialidad manufacturera ha subido 1.45 unidades, con especial interés en el área de maquinaria y equipo, automotriz, metálica básica, textil y química. Su fortaleza económica se compara con los países de menor calibre del tigre asiático, tal como Vietnam y Tailandia.
Los estados del centro han reforzado sus actividades manufactureras a raíz de la apertura comercial; muchas empresas han cerrado frente a su incompetitividad y desde los ochentas el centro del país ha diversificado sus actividades, delegando así el crecimiento nacional a las regiones fronterizas y de reconversión industrial. A pesar de ser perdedores dentro del TLCAN, la inversión extranjera ha crecido de 10 a 15%, sobretodo en el marco de la inversión de cartera y para fomentar actividades industriales; con esto su especialidad también ha rebasado el promedio nacional por encima de 1.25 unidades y se mantienen las actividades tradicionales de: elaboración de alimentos, industria química, industria textil e industria papelera. Su fortaleza económica se compara con países europeos relevantes como Grecia y Bulgaria.
Los estados petroleros cuentan con el vital “oro negro” que es todavía pieza clave en la industrialización nacional, de este mineral se obtienen el 30% de los ingresos federales, y que a su vez se reinvierte en la empresa mexicana (paraestatal) más grande para desarrollar actividades complementarias que llevan a mejorar la extracción y transformación del petróleo. Su fuente de recursos externa es también vital para la modernización de la paraestatal, por ello cubre entre el 10-12%de la IED nacional, y su especialidad en la extracción de petróleo avanzó 15 unidades, es por ello que es su actividad primordial y debe convertirse en una empresa de vanguardia ahora que se le inyectan recursos exclusivos para la Investigación y el Desarrollo. La fortaleza de esta región sólo puede compararse con otros países exportadores de petróleo como Etiopía y Nigeria.
Los estados del sur cuentan con importantes recursos naturales y humanos, pero no los han podido focalizar hacia actividades de valor agregado; siendo que el Estado ha inyectado recursos y financiamiento a actividades poco productivas y que finalmente los beneficiados son las regiones próximas y ricas a las que subterráneamente les traspasan todos estos fondos. En estos estados la inversión externa es muy débil con apenas 3% y su índice de especialidad se retrajo a partir del TLCAN, con lo que perdió 0.25 unidades respecto a la especialidad promedio nacional en manufacturas. Debido a que son estados ricos en recursos pero pobres en producción, su fortaleza económica se compara con países africanos como Camerún y Yemen. Ya que son considerados como invaluables herederos y conservadores de la cultura mexicana ancestral, esta región puede desarrollarse en un nuevo marco ecoturístico y con fuerte vinculación dentro y fuera de la comunidad para que puedan conservar estas tradiciones y a su vez puedan transmitirlas a la gente curiosa y de mente abierta; además de que es posible iniciar programas de braceros que trabajen en la maquila de exportación (dadas sus capacidades motrices y sus habilidades manuales) por algún tiempo y luego regresen a su lugar de origen para que no pierdan contacto con su comunidad y adquieran nuevos conocimientos sobre el mundo actual.
Los estados turísticos mantienen un movimiento similar a los fronterizos ya que su actividad gira en torno al movimiento de personas que pasan un periodo vacacional en estas zonas; la actividad turística es fundamental para mover al resto de los sectores que se aferran a ella para tratar de vender productos a los extranjeros. La IED radica entre 12-15% y su especialidad en el área de comercio, restaurantes y hoteles creció en 1.5 unidades, arrastrando así actividades complementarias como la artesanía, la elaboración de alimentos y bebidas y los textiles. Su fortaleza económica se compara con países también dependientes del turismo como Bolivia y Costa Rica.
Los estados que cuentan con materias primas se han especializado en su usufructo y han adquirido un respetable catálogo de productos elaborados con calidad y a la vanguardia de la tecnología utilizada en países del primer mundo. En esto países la entrada de capitales ha sido muy limitada ya que abarca entre un 6-8% de la nacional, pero su especialidad alcanzó 2.85 unidades arriba para la rama minera, 3.45 unidades para la rama agropecuaria y 0.50 unidades para la manufacturera, siendo sus principales actividades la extracción y transformación de la madera (muebles), la extracción y transformación de minerales preciosos (oro, plata), la siembra y cosecha de hortalizas, cereales y frutas de temporal. Su fortaleza económica se compara con países de poco peso como Panamá y Mozambique.
Con esto se demuestra la disparidad regional, que si bien ha disminuido respecto a épocas pasadas y a la concentración de actividades, aún es muy amplia en cuestión a diferencia de ingresos y rentabilidades. Las regiones ricas que atraen recursos humanos y extraen los naturales de la regiones pobres favorecen esta condición, pero el gobierno tiene mucho que decir y más que hacer para evitar concentraciones y favorecer un desarrollo parejo en todo el agregado nacional.
Es necesario enmendar el camino en tres aspectos, el primero es la visión macroeconómica, ya que debemos de reconocer las fallas del modelo, las limitaciones del Tratado de Libre Comercio, y las desregulaciones que han venido a afectar el aparato económico; es urgente hacer reformas estructurales sobre las privatizaciones para tener un mayor control de los mercados, reformar el sistema educativo para que sea una enseñanza de calidad y con aplicabilidad contemporánea, además de reformar el sistema financiero para evitar la salida masiva de capitales y para regular los préstamos light que se ofrecen a pasivos incumplidos, y reformar el sistema fiscal para que se abarque al subempleo, así como también reformar el sistema jurídico y de seguridad social para que también abarque al subempleo y a la subcontratación. Segundo en el ámbito territorial, se debe contemplar de inmediato a las capacidades productivas locales y al espacio económico en cuestión, antes de hacer acciones que tienen repercusiones o limitaciones, para que así las políticas públicas tengan un efecto real inmediato y de largo plazo; a su vez que se debe descentralizar la autoridad y delegar las acciones a los grupos o instituciones con mayor eficacia para llevar a cabo estas acciones. Tercero en el ámbito microeconómico, se debe fomentar las cadenas productivas al interior del país no con el fin de abarcar más sino de especializarse en aquellas donde se tengan ventajas competitivas.
Las principales teorías del crecimiento regional
El objeto de este apartado es revisar las principales teorías que han dado hincapié al espacio económico como una variable de dimensión que hay que considerar al proponer políticas económicas.
Los territorios en general poseen ventajas geográficas, tales como recursos naturales, artificiales, humanos, los cuales permiten el desarrollo social y económico de esa región. Un espacio económico se construye a partir de las interacciones comerciales, sociales, culturales, etc. que existen entre ambas y su grado de complementación. Cuando una región se integra y se especializa en alguna actividad, se dice que esta región ha avanzado en la escala económica y si es capaz de competir a nivel global con regiones análogas, entonces la región se vuelve competitiva.
A continuación se exponen las teorías espaciales de Perroux, Myrdal, Marshall, Shumpeter y Krugman; tratando de armonizar en una teoría general aplicable a nuestro país.
a) Teoría de los polos de crecimiento
La teoría de los polos de crecimiento nos habla de dos tipos de industrias: aquellas que son motrices para el desarrollo de una región, también consideradas como básicas para la industrialización; y aquellas consideradas complementarias y que son base para que las primeras crezcan y permanezcan en la competencia global. Cuando una región invierte recursos para fomentar una actividad motriz entonces esta región crece y envía un derrame económico al resto de la región por medio de excedentes dinerarios que pronto se convierten en recursos para fomentar las actividades complementarias.
El crecimiento de las actividades “complementarias” (definidas como aquellas que están orientadas exclusivamente al mercado local de consumo final e intermedio) depende inicialmente del ingreso generado por las actividades exportadoras o básicas y, por ende, de la demanda externa. Por lo tanto, se asume que las actividades no básicas tienen un papel pasivo en la promoción del crecimiento económico. La teoría de la base económica sostiene que la producción para el mercado local sólo puede aumentar si se incrementa el ingreso local, y éste puede crecer sólo si la demanda total externa de la producción crece, de modo que el cambio exógeno necesariamente sólo puede ocurrir en el sector exportador.
El argumento sostiene que el desarrollo de las industrias motrices regionales depende de las ventajas comparativas de la región, reflejadas en los costos relativos de producción y transferencia; así como del ingreso (mercado) de las regiones adyacentes. Es decir, una región crecerá en la medida en que sus industrias motrices puedan competir en otras regiones. Por lo tanto, en la medida en que los costos de la industria motriz dependen substantivamente de las actividades complementarias estas últimas necesariamente desempeñan un papel clave en el crecimiento potencial de la región—en relación con las importaciones, es posible que los precios de insumos industriales y bienes de consumo final se reduzcan si se producen localmente, y la reducción del precio de estos últimos, además, permitirá reducir los salarios locales. Desde esta perspectiva, el desarrollo de las actividades complementarias (agropecuarias, semi-industriales y de servicios) es necesario para sostener el crecimiento de la base exportadora, y por ende de la economía regional, en el largo plazo.
El tamaño de la región, en términos de población, condiciona la importancia del comercio externo versus el comercio interno, en la promoción de su crecimiento. En general, se sostiene que a medida que aumenta el tamaño de la región, su comercio interno adquiere mayor importancia y, en consecuencia, disminuye la relevancia de las exportaciones.
Cuando una región crece, se desarrolla y se vuelve rica, es a costa de la precarización de otras regiones ya que absorbe su población, sus recursos naturales e incluso parte de sus actividades económicas; es por ello que las regiones periféricas deben buscar actividades que se vinculen y complementen al crecimiento de la región central, esto con el efecto positivo de generar empelo, recursos y especialidades, de lo contrario la región solo se hace más pobre y tiende a desaparecer.
El modelo de causación circular-acumulativa representa una línea de pensamiento cuyo argumento central postula que las fuerzas del mercado tenderán a ampliar las diferencias entre regiones avanzadas y rezagadas en cuanto a sus tasas de crecimiento. Se argumenta que en el proceso de desarrollo nacional, las regiones que tienen ventajas iniciales (recursos naturales, nodos de transporte, mercado potencial, centros administrativos, etc.) experimentan un crecimiento más rápido que el resto de la nación; y que a su vez, la acumulación industrial y el desarrollo de infraestructura en localidades avanzadas generan importantes economías internas y externas potenciales, que implican reducciones en costos para la operación de las empresas. En la medida en que aumentan las economías que las empresas pueden aprovechar en esas localidades, se estimula también el crecimiento económico de las mismas, y así el proceso se vuelve auto-reforzante. En contraste, de acuerdo a este argumento, el ritmo de crecimiento de las regiones rezagadas tenderá a desacelerarse, ya que sus ventajas limitadas (mano de obra barata) no son suficientes para hacerle contrapeso a la atracción ejercida por las ventajas de las regiones avanzadas.
El argumento central sugiere que el crecimiento de las regiones rezagadas es, en gran medida, un efecto inducido por el crecimiento de las regiones industrializadas. Por un lado, existe un efecto favorable que se transmite a través de la demanda —de las regiones industrializadas— por la producción (típicamente de productos primarios) de las regiones rezagadas, así como mediante derramas en forma de inversiones y difusión de innovaciones. La absorción de la mano de obra excedente de las regiones rezagadas por las áreas industrializadas, también produce un efecto favorable en la medida en que contribuye a elevar el ingreso per cápita de las primeras. Por otro lado, los efectos adversos se relacionan con la migración de población capacitada y joven, al igual que del escaso capital, de las regiones rezagadas a las industrializadas. Durante periodos bastante prolongados, se argumenta, el saldo neto será negativo para la mayoría de las regiones rezagadas. Por lo tanto, la conclusión obligada es que, si el desarrollo de una economía nacional es regido únicamente por las fuerzas del mercado, este se caracterizará por un proceso de crecientes desequilibrios en la escala regional.
El proceso se repite sucesivamente a niveles crecientes resultando en una ampliación constante de la brecha entre regiones de crecimiento rápido y de crecimiento lento. Aquí, los rendimientos crecientes a escala (equivalentes a las economías de aglomeración) son el elemento clave que conduce a una creciente concentración espacial de la actividad económica. Es claro que la teoría de la causación acumulativa apunta hacia un proceso de desequilibrio interregional, el cual se refleja en el constante flujo neto de recursos productivos hacia las regiones de mayor rentabilidad.
c) Teoría del Nuevo Distrito Industrial
El enfoque del Distrito Industrial de Marshall, se basa la localización de agentes dada la disponibilidad de recursos (insumos locales), los costos de transporte y la accesibilidad al mercado; las nuevas teorías agregan la facilidad con que estos agentes pueden exportar y la capacidad interna de absorber la transferencia de conocimientos, además de otros factores que tienen que ver con los costos como es la logística, la infraestructura y la entrada de insumos móviles de bajo costo. Para Marshall, el tamaño de mercado local era vital para soportar la estructura económica, y por ende el crecimiento económico local; a mayor población mayor mercado, mayor infraestructura urbana, y mayor elasticidad del precio ingreso de la demanda. Las firmas localizadas en estos mercados cuentan con mayor mano de obra que hace bajar la base salarial a su vez que aumenta la productividad, y bajo este crecimiento, también aumenta la oferta de bienes de capital que permite industrializar a la región.
La introducción del espacio implica la existencia de costos asociados con la reasignación de factores de producción, con el movimiento de mercancías, y con la transmisión de información. El modelo de las aglomeraciones, además de los movimientos interregionales de factores del enfoque neoclásico, incorpora también las economías de aglomeración (tendencias de crecimiento desequilibrado), y también un factor de distancia inter- e intraregional. Plantea que el crecimiento económico regional está relacionado con la oferta de los insumos o factores productivos y con los cambios tecnológicos. Tiene sin embargo, una importante característica estructural distintiva, consistente en que el rendimiento de la mano de obra y del capital depende del nivel de las economías de aglomeración. Al respecto, específicamente se asume que las tasas salariales y los rendimientos al capital se relacionan positivamente con el tamaño de las aglomeraciones urbanas, lo cual conduce a un crecimiento interregional e intraregional desequilibrado.
Se asume también que las economías de aglomeración influyen en la transmisión de los cambios técnicos. Al respecto, se plantea que la difusión del progreso técnico se relaciona de manera directa tanto con el tamaño del área urbana dominante de la región como con el grado de integración del sistema urbano regional o “economías de aglomeración en común”. Por otra parte, se plantea que el factor distancia se relaciona inversamente con el progreso técnico de la región, es decir, la distancia tiene el efecto de desacelerar la difusión del progreso técnico y la migración de mano de obra. Así, según este esquema, los diferenciales interregionales en tasas salariales y en rendimientos al capital, así como en el tamaño absoluto del acervo de capital en realidad podrían reforzar o contrarrestar la tendencia de crecimiento desequilibrado inducida por los factores de aglomeración. El resultado final es entonces una cuestión empírica.
La concentración económica surgida por las economías de aglomeración se da gracias a los rendimientos del mercado; pero conforme avanza el crecimiento, las economías se agotan y su localización se hace menos rentable y menos deseable; el uso de suelo escasea y se vuelve más costoso adquirir terrenos estratégicos, es cuando la población comienza a extenderse a los suburbios. La diferencia de renta hace que las actividades primarias se vuelvan menos rentables que actividades semi-industriales y servicios de primera necesidad: transporte, comunicación, comercio, vivienda, etc.; es cuando surgen los grandes monopolios que absorben todos los beneficios.
Por otro lado, Marshall pone de manifiesto que dentro de una rama industrial, es elemental el cambio técnico y organizacional que se dan a nivel inter-firma e intra-firma; además reconoce la importancia del aprendizaje en el proceso de formación del conocimiento, y su ambiente innovador en donde los productores pueden alcanzar altos niveles de conocimiento tecnológico. Para Marshall y después para Shumpeter, los principales mecanismos de transferencia de conocimiento son las relaciones cliente-proveedor tanto por medios formales e informales, estas relaciones enriquecidas por un ambiente innovador y dinámico en el cual el gobierno debe actuar con determinismo y autoridad.
Las regiones provistas para desarrollar sistemas de innovación tienen elementos centrales como organizaciones comunicativas y autónomas intra-firma, relaciones fuertes y dinámicas inter-firma, un papel protagónico del Estado y su amplia división jerárquica, además de las instituciones financieras, centros de investigación y vínculos entre Universidad-Empresa.
d) Teoría de los Rendimientos Crecientes
El argumento neoclásico sugiere que el capital y la mano de obra tenderán a migrar de las regiones de baja rentabilidad hacia las de rentabilidad mayor. En consecuencia, se sostiene que las diferencias interregionales en tasas de crecimiento son, en gran parte, resultado de los diferenciales interregionales en tasas de rentabilidad del capital y la mano de obra (que a su vez determinan la oferta regional de esos factores), y de la movilidad geográfica de esos factores. Al respecto, se asume que las empresas (capital) buscarán localizarse en regiones donde su rentabilidad sea relativamente alta. De forma análoga, se propone que la mano de obra migrará hacia donde su rendimiento esperado sea el mayor. El rendimiento esperado de la mano de obra considera además del salario real, ajustes en calidad de vida y la probabilidad de encontrar trabajo.
En un extremo, no se espera que las industrias con orientación al mercado local, una vez que se han hecho ajustes por el tamaño del mercado, migren en busca de una mayor rentabilidad, ya que en esas industrias los diferenciales de rentas entre regiones no varían sustancialmente. En este tipo de industrias los precios de los insumos, en particular la mano de obra, y de sus productos, son determinados por los mercados locales, y dado que el capital requerido para ingresar es relativamente bajo, la competencia rápidamente elimina rentas anormales. En el otro extremo, los diferenciales interregionales de renta son substanciales para las industrias de exportación, pues en industrias que sirven principalmente mercados nacionales la demanda y el precio del producto se determinan en mercados nacionales, mientras que el precio de los insumos, principalmente mano de obra, se determina localmente y, por lo tanto, puede variar de una región a otra. Es esta variación regional en el precio de los insumos, la cual implica rentas diferenciales, la que induce los flujos interregionales de capital, y por ende, los desplazamientos de producción y empleo. Todas las industrias se encuentran en algún punto entre estos dos casos extremos. En cuanto a la movilidad de la mano de obra, el argumento neoclásico propone que variará dependiendo también de la edad y la educación del trabajador, entre otras características.
El establecimiento definitivo de la teoría del crecimiento endógeno regional se remonta a la obra de Romer. Ese trabajo, también desarrolla una prueba empírica para evaluar la respuesta (movilidad) de los factores de producción ante diferenciales interregionales de precio, y la relación entre la producción no agrícola y la proporción capital-mano de obra. Romer adjudica que la respuesta está en función de la tasa de innovación y transferencia de conocimientos que puede adquirir la región, pues son estas las que inducen a tener rentas económicas excedentes y productividades laborales más altas.
De suma importancia en el enfoque neoclásico es el postulado de convergencia. Este sostiene que los rendimientos al capital y a la mano de obra de las diferentes regiones convergerán en el largo plazo. El mecanismo de autoajuste parte de una situación de desequilibrio y, en general, propone que aquellas regiones con ventajas de costos atraen empresas a una tasa mucho mayor que la del resto de la nación y, por ende, experimentan tasas de crecimiento relativamente rápidas; sin embargo, prosigue, a medida que aumenta la concentración de empresas en esas regiones, los costos tienden a incrementarse progresivamente, lo cual implica que dicha tendencia locacional cesará cuando los costos de producción sean similares a los del resto de las regiones. Es decir, se alcanza una situación de equilibrio. Así, en general se asume que cualquier diferencial interregional en la tasa de crecimiento será eliminada con el tiempo. De igual modo, la mano de obra tenderá a migrar hacia regiones con salarios reales relativamente altos hasta que la tasa salarial sea igual a las de las otras regiones. En equilibrio, las tasas salariales y los rendimientos al capital serán iguales en todas las regiones.
La crítica al enfoque neoclásico se ha centrado en algunos de sus supuestos principales, entre otros los siguientes: demanda perfectamente elástica para la producción de la región; recursos perfectamente móviles; y disponibilidad de información perfecta para inversionistas y trabajadores respecto a los precios de los factores. Las críticas también han aludido a la asumida homogeneidad de las regiones, así como a la exclusión del territorio y los costos de transportación, lo cual en conjunto lleva a excluir el factor “aglomeración”, la teoría de la aglomeración que se revisa en seguida, sugiere que el rendimiento esperado de los factores de producción se incrementan más allá de su nivel promedio de remuneración, como efecto precisamente de la aglomeración. No obstante, el modelo neoclásico permite considerar la posibilidad de que las regiones de salarios altos atraigan no sólo mano de obra sino también capital. Para tal efecto, se puede permitir que la función de producción de la región de salarios altos especifique rendimientos crecientes (debidos en parte a las economías de aglomeración), o introducir múltiples sectores y permitir cambios en la demanda a favor del producto de exportación de la región de salarios altos. El modelo también se puede diseñar para tomar en cuenta las fricciones territoriales y los costos no económicos que inhiben la migración en el contexto de inversión en capital humano, la mano de obra sólo se moverá si la tasa de rendimiento esperada es superior a los costos de desplazarse.
e) Teoría de la Nueva Geografía Económica
Al igual que los enfoques de la causación acumulativa y de las aglomeraciones, el enfoque de la Nueva Geografía Económica, desarrollado por Krugman, también otorga un papel central a las economías de aglomeración en el desarrollo del patrón regional del crecimiento económico. Sin embargo, el distintivo de este enfoque es que no hace supuestos sobre dichas economías, sino que las modela como una interacción, en el mercado, entre (i) economías de escala (a nivel de la empresa), (ii) costos de transporte y (iii) movilidad de los factores productivos. En otras palabras, evita el tradicional supuesto de que los rendimientos crecientes son puramente externos a la empresa —el cual a su vez permitía asumir competencia perfecta— y modela la estructura de mercado a nivel de la empresa individual.
El modelo básico, por una parte, asume una economía de dos sectores: manufacturas con rendimientos crecientes a escala, y agricultura con rendimientos constantes; solo para las manufacturas hay costos de transporte. Por otra parte, asume que solo hay dos factores de producción: obreros que trabajan en el sector de manufacturas y que pueden migrar de una localidad a otra, y agricultores que producen bienes primarios y no emigran; los factores no pueden cambiar de sector. Se asume también que los obreros tenderán a migrar de localidades con salarios reales inferiores al promedio hacia aquellas con salarios reales por arriba del promedio (no se modela explícitamente la decisión de migrar). Así, bajo este esquema, la distribución geográfica de los obreros es la que evoluciona a través del tiempo, mientras que la de agricultores es exógena.
En el modelo de dos regiones, la concentración de todos los obreros en la región 1 representará un equilibrio si para una empresa individual no es rentable producir en la región 2. Son varios los elementos que intervienen. Por una parte, en la región 2, la empresa tendrá que ofrecer mayores salarios para poder atraer a los obreros, dado que virtualmente todas las manufacturas son importadas. Por otra parte, los costos de transporte serán una ventaja para las ventas de esta empresa en la región 2, pero una desventaja para sus ventas en la región 1 (el mercado más grande). Por lo tanto, la rentabilidad en la región 2 dependerá del diferencial tanto en el valor de las ventas como de los costos fijos (tasa salarial) entre ambas regiones.
Son tres los parámetros que en este modelo determinan esos diferenciales, y por lo tanto, la tendencia hacia la concentración o la desconcentración: la participación de las manufacturas en el gasto, los costos de transporte, y la elasticidad de sustitución entre productos manufacturados (que representan economías de escala). En el esquema de dos regiones, una mayor participación de las manufacturas en el gasto implicaría menores ventas para la empresa localizada en la región 2, dado que el tamaño relativo del mercado intermedio y de consumo final será mayor en la región 1. Esta es la llamada fuerza centrípeta que favorece la aglomeración. Por el contrario, si es pequeña, las empresas venderían únicamente en los mercados rurales dispersos. En este caso, siempre sería conveniente para las empresas alejarse de cualquier concentración de manufacturas, con el objeto de evadir la competencia. Esta es la fuerza centrifuga que contrarrestaría la aglomeración. En general, se asume que un proceso de creciente concentración (divergencia) es más probable cuando el gasto es grande, debido a las fuertes cadenas productivas hacia atrás y hacia delante que ello implica. Esto valida el conocido argumento de que la aglomeración emerge debido a la relación circular que se da entre la localización del mercado y la localización de la producción manufacturera.
Respecto al papel de los otros parámetros, en el esquema de dos regiones, un costo de transporte elevado hará rentable para la empresa moverse de la región 1 a la 2; es una mejor opción que producir en la primera y transportar el producto a la segunda. En general, se asume que la concentración (divergencia) es más probable cuando el costo es bajo y a medida que crece, se llegaría a un punto en que la concentración geográfica de la producción no sería sostenible. También se asume que la concentración (divergencia) será contrarrestada por una elasticidad de sustitución alta (economías de escala débiles). Por lo tanto, en la medida en que los rendimientos crecientes a escala se fortalezcan, la producción de cada bien tenderá a concentrarse.
Por otra parte, dado que ha combinado las ideas de la causación acumulativa y el lugar central en formas muy innovadoras. Krugman redescubrió los factores de localización que en dicha área de estudios han sido descartados o disminuido en importancia, en particular los costos de transporte. Sin embargo, el propósito del modelo de Krugman es derivar factores generalizables que expliquen el patrón regional o geográfico del desarrollo industrial en el siglo XIX, y que aún en la actualidad son responsables por el agrupamiento espacial de muchas industrias.
La planeación regional en el mundo
La planeación regional es un tema muy discutido en las esferas de intelectuales, ya que concierne a sociólogos, economistas, politólogos, geógrafos, urbanistas, internacionalistas y todas aquellas personas concernientes a los estudios de la sociedad. La integración social no es cosa fácil y mucho menos cuando existen diferencias étnicas, culturales y sociales que pueden desalentar la integración. En este marco examinamos dos regiones con un alto poder económico y que han sufrido conflictos bélicos al interior de sus economías, pero que con mayor o menor eficacia han integrado dentro de sus acciones incluir una agenda destinada a la planeación regional y a aplicar políticas para favorecer el desarrollo de comunidades atrasadas. Es el caso de la Unión Europea la cual tiene más de 50 años intentado integrarse como supra nación y que ha conseguido los mejores resultados en cuestión a distribución del ingreso y desarrollo económico sustentable; el otro caso es China quien tiene la mayor tasa de crecimiento económica pero que sufre de un constante crecimiento desequilibrado.
a) Unión Europea
La política de la Unión Europea se basa en la solidaridad financiera y la ayuda mutua, ya que los estados miembros transfieren parte de su ingreso en la cooperación de los estados más pobres; entre 2000 y 2006 éstas alcanzaron una tercera parte del presupuesto comunitario, los cuales se dividieron en Fondos para el Desarrollo Regional Europeo, el cual basa sus recursos para fomentar las actividades en la regiones pobres; el Fondo Social Europeo, el cual fomenta ayuda a las regiones necesitadas a proveer productos y servicios hacia las regiones ricas, además de que capacita y fomenta el empleo de calidad; el Fondo de Cohesión, abarca el financiamiento a comunidades y la promoción de actividades industriales con su creciente incorporación al mercado europeo; algunos otros fideicomisos abarcan la inversión en actividades agrícolas, ganaderas y pesca.
Los Fondos estructurales tienen 3 objetivos en común:
- 70% de los créditos es para recuperar las regiones menos avanzadas que representan el 22% de la población.
- 11.5% de los créditos es para apoyar la reconversión delas zonas con dificultades estructurales, abarca el 18% de la población.
- 12.3% de los créditos favorecen la modernización de los sistemas de formación y fomento al empleo.
Además de los Fondos, existen acciones innovadoras que pretenden mejorar el desarrollo local, tal como el Instrumento de Pre-adhesión el cual estimula a los países que quieren formar parte de la Unión Europea para que se industrialicen, fortalezcan su moneda y adquieran mayores capacidades exportadoras; también el Instrumento Equal con el cual se busca la igualdad en las relaciones de trabajo y la no discriminación ya sea por motivos raciales, étnicos o de género; el Instrumento Interreg III sirve para comenzar a cooperar de forma transnacional aunque no sea parte de la Unión, siempre y cuando esté vigilada y controlada por las autoridades federales o locales y no contravenga a los intereses de la Confederación o afecte el comercio de otras regiones internas.
La integración en la Unión Europea ha sido exitosa, bajo ciertas excepciones, porque los territorios con desventajas han aprendido la nueva lógica económica y están dispuestos a competir con marcas y productos innovadores y que cumplen las más altas normas de calidad. Esto ha favorecido la integración económica y social y ha resaltado la importancia de mantener un crecimiento equilibrado en todas sus regiones económicas, ya que la disparidad ha disminuido el conjunto confederal puede acceder a nuevos mercados sin la preocupación de afectar a regiones. Es importante resaltar que la política exterior de la Unión Europea, favorece los intereses de estas regiones incipientes, pues las protege de rivales muy fuertes, a través de barreras arancelarias y no arancelarias, es decir protege su industria con muchas trabas a la importación ya sea en cuestión a calidad, estándares más elevados que los internacionales, etc. y con esto favorece el comercio intraregional y el crecimiento sectorial.
b) China
La política de China ha sido favorecer Zonas Económicas Exclusivas (ZEE), las cuales se ubican en los principales puertos comerciales y cuentan con infraestructuras sumamente complejas dignas de primer mundo; tienen ventajas fiscales y administrativas gracias al buen manejo de sus instituciones, y cuentan también con una red de transporte multimodal que les permite virar hacia varias direcciones y hacia los lugares exclusivos donde están instaladas las maquilas de exportación. Este nuevo modelo de desarrollo es con el que China ha alcanzado la mayor integración de redes globales de producción y el que ha absorbido la mayor inversión externa junto con sus efectos multiplicadores sobre el ingreso y el empleo.
Frente a esto la región céntrica y occidental de China sigue muy rezagada a sus actividades primarias, comparativamente son personas con un nivel de vida similar al de un país atrasado y ni la inversión externa ni la pública han logrado estimular estas regiones. Esto es un grave problema que pareciera no importar demasiado puesto que la política seguirá vinculada a aquellas regiones dinámicas y con altas capacidades de integración y desarrollo, que favorecen la actividades industriales de punta; y lo que se busca es integrar a las regiones pobres con sus actividades a partir de la innovación tecnológica para que la industria y la agricultura puedan alcanzar un desarrollo sostenible y sustentable.
La planeación regional en México
El análisis general de los nexos entre teoría y objetivos e instrumentos de política, efectuado en el apartado anterior, provee el marco analítico para deducir los principios teóricos de la política industrial regional orientada hacia la desconcentración y el impulso de áreas periféricas (impulsada durante los setenta y hasta inicios de los ochenta); de la erradicación de dicha política y el dominio del mercado en la asignación interregional de recursos a partir de la segunda mitad de los ochenta; y de la política actual (impulsada desde inicios de los noventa), que pretende fortalecer la competitividad regional, promoviendo el desarrollo de sistemas productivos locales y la integración de la pequeña y mediana industria.
El propósito central es contribuir a la aplicación de una planeación regional y la gestión pública local en México, abandonando la gastada política sectorial y la abdicación del gobierno a conducir la planeación urbana y regional de manera limitada; y pasar a una política regional con enfoque planificador, esclareciendo así que los objetivos y la acción son comunes y colectivos tanto de los instrumentos de la política industrial como de lo regional.
a) Los rasgos de la política regional y el objetivo de desconcentración
Desde 1970 y hasta inicios de los ochenta se construyo un amplio sistema de planeación y programático, y se aplicaron considerables recursos para impulsar la desconcentración económica de la Zonas Metropolitanas de la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara hacia la extensa periferia del país y en especial hacia las ciudades medias. Uno de los instrumentos centrales fue la aplicación de un esquema regionalmente diferenciado de incentivos fiscales y financieros, así como de subsidios al precio de servicios públicos y energía, para las empresas. Bajo este esquema, los mejores incentivos se otorgaban en las regiones que se pretendía impulsar, mientras que las grandes aglomeraciones urbano-industriales invariablemente eran excluidas.
Las principales ciudades en los que el gobierno federal, estatal y local actuaron de forma armónica, y con esto lograron instaurar importantes parques industriales que dieron empleo directo a miles de personas, e indirecto a cientos de proveedoras. El caso por excelencia es el complejo automotriz ubicado en Guanajuato con la instauración de la General Motors, Aguascalientes con Nissan, Hermosillo con Ford, Puebla con Volks Wagen, Tijuana con Toyota, y Guadalajara con Honda. También hay que destacar la industria electrónica con los clústers de Guadalajara en donde se encuentra HP e IBM, Tijuana donde se localizan Sony y Samsung, Mexicali con Kodak y Hitachi, y Ciudad Juárez con Siemens y Philips. Y por último los parques industriales abocados a la industria textil como son León con Flexi y Export, Tianguistenco con Arce y Johnson, y Puebla con Lee y Furor.
Las políticas públicas que se desarrollaron a fines de siglo dieron un importante paso en la elaboración de acciones locales y pero no lograron modificar la distribución económica que pernea dentro del territorio nacional. Los recursos obtenidos del federal, fueron usados por los estados y por los municipios para pagar sus gastos administrativos (aproximadamente un 45%), otra parte en forma de transferencias para pagar subsidios (30%) y lo último para hacer obras públicas (15%), el resto era pagos a la deuda pública y otros rubros. La calidad de vida relacionada con los estándares de educación, seguridad pública y salud fueron administrados por el gobierno federal a través de fondos de aportaciones; éstos impactaron de forma variable como en Baja California donde cada alumno de escuela pública recibe un monto de 9,338 pesos mensuales para material y recursos escolares mientras que uno de México recibe sólo 4,233 pesos; y frente a esto los docentes se multiplican para obtener su bono de eficiencia el cual asciende en México a 16,000 pesos, esto hace obvio el porqué crecen las plazas de personas que poco conocen su docencia y que perjudican el avance intelectual de los niños mexiquenses. Situación similar presentan los fondos destinados a la salud, a la seguridad social y a la infraestructura social.
La descentralización de actividades no se ha alcanzado como se tenía previsto; hace falta una mayor participación local y regional dentro de las actividades que impulsan el desarrollo, y el gobierno federal debe delegar esta autoridad a quienes más eficaces resulten en su aplicación. Por otra parte la descentralización no es recomendable cuando se presentan altos grados de corrupción y hay una desconfianza generalizada a los gobiernos estatales y locales; para evitar esto, existen instituciones que se encargan de medir la confianza del público y califican el desempeño político en función de sus acciones y los resultados alcanzados, el Instituto de Acceso a la Información Pública (IFAI) puede ser un portal para que la descentralización de actividades sea la esperada.
b) La política regional
Como objetivo de revertir los desequilibrios interregionales se diseñó una política dentro del Programa Nacional de Fomento Industrial y Comercio Exterior 1984-1988, básicamente, un reducido número de ciudades medias, ejes y corredores industriales es seleccionado para cumplir la función de centros de desarrollo: la llamada estrategia de “descentralización no dispersa”. El nivel de los estímulos fiscales y financieros a la inversión privada se establece en función de ese esquema: el estimulo era mayor si la inversión encajaba dentro de la especialización y funciones asignadas al centro respectivo. Este esquema de subsidios, junto con la inversión pública en infraestructura, y el poder de demanda de las industrias siderúrgica, petroquímica, y de equipo de transporte, entonces paraestatales, se concibieron como los principales instrumentos. Sin embargo, los recurrentes efectos adversos de la crisis económica de 1982 habrían de impedir la materialización de dicha estrategia. Por otra parte, las instancias de planeación local y coordinación intergubernamental utilizadas para asignar el gasto federal en los estados se mantuvieron vigentes, e incluso se establecen las bases constitucionales para fortalecer la capacidad fiscal de estados y municipios, así como su papel en cuanto a provisión de servicios.
En buen número de trabajos se ha observado como desde el inicio del periodo gubernamental 1988-1994, los esfuerzos consistentes en impulsar exógenamente el desarrollo de zonas económicamente deprimidas y descentralizar la actividad económica, desaparecen de la estrategia gubernamental de desarrollo. Esto ha implicado la reconfiguración de diversas instituciones públicas relacionadas con el fomento a la industria. A diferencia de la política regional de los setenta e inicios de los ochenta, en este nuevo enfoque no se considera el nivel de desarrollo de las regiones, no se contempla incentivos diferenciados de acuerdo al nivel de desarrollo de la región, ni objetivos de desconcentración.
Los documentos de planeación establecen que la política industrial se concentraría en promover el funcionamiento eficiente del mercado en la asignación de los recursos productivos, incluyendo su asignación interregional (Plan Nacional de Modernización Industrial y Comercio Exterior 1990-1994). Se plantea también la necesidad de dirigir los esfuerzos de estado en materia de promoción industrial principalmente hacia la Pequeña y Mediana Empresa (PyME) para apoyar aspectos de: investigación y desarrollo (I&D), acceso a mercado de capitales, y transferencia y asimilación de tecnología, entre los más relevantes, además del estimulo al aprovechamiento de los factores productivos del país, y el impulso a una cultura de internacionalización y calidad total.
Dentro de esta política industrial de impulso a la competitividad de la planta industrial y en particular de la PyME, la vertiente regional también plantea cambios sustantivos. El fomento al desarrollo de agrupamientos industriales y cadenas productivas, de carácter regional y sectorial, así como la integración amplia de las PyME a los mismos, se combina con otras políticas generales dirigidas a mejorar la oferta de infraestructura en comunicaciones y transportes, energía y otros insumos industriales básicos, las cuales contemplan una creciente participación del sector privado. Por otra parte, se proponen políticas relacionadas con la adecuación de la oferta del sistema educativo para fortalecer la capacitación y formación continua, y fomentar el acercamiento del sistema educativo y de investigación con la industria. La estrategia asigna un papel decisivo a las acciones inter-institucionales, coordinadas a nivel regional, en las que participen sector privado, gobiernos estatales, gobierno federal, y organizaciones semi-gubernamentales. Algunos esfuerzos desde la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial hasta la actual Secretaria de Economía, también han convergido en el propósito de contribuir a la modernización tecnológica, y de elevar la capacidad de aprendizaje de las PyME, a través de impulsar la cooperación inter-empresarial, el intercambio y la difusión de información, y el enlace con centros de investigación. Entre sus acciones más relevantes están las siguientes:
1. Red Nacional de Centros de Competitividad Empresarial (CRECE), cuyo propósito es prestar servicios y atención especializada (tecnológica, de gestión y de información) a la micro, pequeña y mediana empresa Asimismo, los centros regionales CRECE, uno en cada estado, prestan servicios de diagnóstico empresarial, evaluación de la posición competitiva de la empresa, identificación de áreas de oportunidad, y diseño de alternativas para elevar la productividad.
2. Proyecto de Desarrollo de Proveedores o Clientes de Base Tecnológica, que pretende fomentar la creación de redes de empresas para fortalecer las cadenas productivas, complementando los esfuerzos de NAFIN y BANCOMEX en este aspecto.
3. Comité Nacional de Productividad e Innovación Tecnológica (Compite), que asocia a consultores certificados para impartir talleres regionales de capacitación y estrategia, por ramas industriales.
4. Programa de Empresas Integradoras con el propósito de eliminar intermediarios y permitir a las empresas asociadas la adquisición de materias primas, insumos y activos tecnológicos en condiciones competitivas en cuanto a precio, calidad y oportunidad de entrega. Este programa otorga incentivos a la asociación de empresas para que bajo un esquema de cooperación se provean servicios especializados a los asociados, acceso a tecnología y financiamiento, promoción y comercialización, diseño de productos, y subcontratación.
Para 1996-1999 el nuevo programa de SECOFI junto con las autoridades estatales y municipales era la potencialización de los factores productivos locales, entre ellos el fortalecimiento de productos con base de exportación, pues el peso frente al dólar se recuperaba y permitía mantener las exportaciones fuertes , además de que China aún no entraba dentro de la Organización Mundial de Comercio y por tanto no era amenaza para abatir productos mexicanos en el exterior. El fortalecimiento del apoyo gubernamental vía inversión pública en infraestructura, cosa que hemos revisado no fue satisfactorio gracias a la fragilidad política y a los desajustes macroeconómicos antecesores. El desarrollo empresarial para fomentar la iniciativa privada y nacional, cosa que era incipiente para un país donde había dominado la autoridad central y la inversión pública. El desarrollo de capital humano, más que educativo, con opciones para avanzar su complementariedad intelectual en instituciones de calidad foráneas. Algunas de las medidas que se rescatan dentro de esas acciones son:
1. Acuerdos locales en la frontera norte, los cuales incluyen una “Bolsa de Subcontratación” la cual permite la promoción de negocios desde la subcontratación hasta acuerdos estratégicos entre grandes conglomerados y pequeñas proveedoras; esto desarrolla productos mexicanos, los hace avanzar en el sentido industrial y son integrados a las redes globales de producción.
2. Acuerdos de industrialización vía integración de clusters, los que cuales integran en una zona industrial a actividades motrices con complementarias; aquí también existe desarrollo de productos mexicanos y promoción empresarial por medio de la ingeniería en reversa y la transferencia de conocimientos, además de que la vinculación entre centros de desarrollo e investigación con empresas las hace sumamente dinámicas y competitivas.
3. Desarrollo empresarial en el Sur, donde es vital la conformación de un empresariado fuerte y dispuesto a llevar a la región a esquemas más industrializados sin comprometer la cultura arraigada. Programas públicos como Desarrollo de Empresas Integradoras, Tienditas, Financiamiento a la Modernización y los programas privados como Uniones de Crédito y Cámaras Industriales fomentan la participación colectiva para formar un negocio y mantenerlo.
4. Renovación del conglomerado del centro, el cual introduce un apartado sobre el cuidado al Medio Ambiente y favorece la reinversión y actualización de la maquinaria y equipo con controladores ambientales y se crea un fideicomiso para la PyME, así como la creación de zonas industriales integradas y bien comunicadas.
5. Especialización en las actividades más rentables; aquí se incluyen muchas regiones aptas para los servicios comunales y estatales, para el turismo o que tienen vocación para actividades primarias. El objetivo es que se integren a la nueva dinámica económica y que adapten sus recursos y sus aptitudes para crear actividades innovadoras con un sentido humano y con la visión de mantener el crecimiento sustentablemente.
En el importante aspecto de la modernización tecnológica el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) ha emprendido algunas acciones. Algunos de los 27 centros de investigación del Consejo, la mayoría de los cuales se localizan en provincia, han intentado establecer formas de cooperación con empresas locales, gobiernos estatales, y otras instituciones de investigación o formación técnica. Varios de esos centros en realidad cuentan ya con una trayectoria de cooperación a nivel regional y/o local. Otros esfuerzos del mismo CONACYT son el Programa de Modernización Tecnológica y el Fondo para el Fortalecimiento de las Capacidades Científicas y Tecnológicas. El primero otorga financiamiento parcial directamente a las empresas para proyectos de desarrollo tecnológico, y también patrocina a centros tecnológicos que apoyen en este aspecto a las PyME; el segundo, brinda apoyo técnico y financiero para crear, expandir, y fortalecer centros tecnológicos privados y del sector público. Ambos pretenden primordialmente mejorar el acceso de las PyME a los servicios tecnológicos, pero también fomentar una cultura de cooperación tanto entre empresas como entre estas y otros agentes de su entorno regional.
Las acciones arriba descritas han resultado a todas luces insuficientes frente a la magnitud de las necesidades financieras, de organización, y de acceso a tecnologías modernas. Se requiere una profundización en las políticas regionales y un concienzudo análisis a las políticas sectoriales, para que ambas con acuerdos y objetivos comunes compartan acciones y mejoren los resultados del crecimiento y el desarrollo sustentable regional; así como una mayor participación social en las actividades productivas y un nuevo y mejorado empresariado mexicano con visión de competir globalmente y la capacidad de innovar en el momento justo que se requiera; y finalmente una cooperación entre todos los sectores del gobierno, la empresa y las instituciones (financieras, educativas y civiles) para que colaboren con la mejora del bienestar social y económico.
Bibliografía y Hemerografía
1. ASUAD, Norman. Un ensayo teórico metodológico sobre el proceso de concentración económica para las principales macro-ciudades: Distrito federal, Guadalajara y Monterrey de 1994-2004. Tesis Doctoral. Facultad de Economía, UNAM. México 2007.
2. BOISER, Sergio. Estrategias del Desarrollo y Planificación en México. Economía de América Latina. CIDE. México, 1990.
3. CAPELLO, Roberta. Regional Economics. University of Kyoto. Estados Unidos, 2003.
4. CLAVIJO, Fernando. Las reformas económicas en México. Lecturas del Trimestre Económico No. 92. México.
5. CORDERA, Rolando. El cambio estructural en México 1982-2004. Revista Economía Informa No. 336. Facultad de Economía, UNAM. México, 2005.
6. DUSSEL, Enrique. Dinámica Regional y Competitividad Industrial. Ed. Jus. México, 1999.
7. GAZOL, Antonio. Diez años del TLCAN, una visión a futuro. Economía UNAM No. 3 Vol. 1. México, 2005.
8. JONES, Charles. Introducción al crecimiento económico. Pearson Education. México, 2000.
9. PERROUX, François. Los polos de desarrollo y la planificación nacional, urbana y regional. Ed. Nueva Visión. Francia, 1951.
10. RUIZ, Clemente. Dimensión Territorial del Desarrollo Económico de México. Facultad de Economía, UNAM. México 2005.
11. YANG, Qiumei. China and its regions. OECD Develop Center. China, 2000.
Páginas de Internet
1. http://www.pyme.gob.mx
2. http://www.energia.guanajuato.gob.mx/gaceta/Gacetaideas/Archivos/04052006_SISTEMAS_REGIONALES_INNOVACION.pdf
3. http://www.senado.gob.mx/comisiones/LX/desarrolloregional/content/foros/desarrollo_regional/Javier_Delgadillo.pdf
4. http://www.inegi.gob.mx/inegi/
Suscribirse a:
Entradas (Atom)